• A las cinco mil millas de distancia, el auto eléctrico etron de Audi tiene un valor promedio de 71 mil 895 euros

• Esto es equivalente a unos 78 mil dólares, o bien unos 1.8 millones de pesos mexicanos

• Por el contrario, a las 100 mil millas, el Model X de Tesla vale 94 mil dólares, 2.2 millones de pesos o 81 mil 200 euros

Dentro del sector automotriz, loas compañías han hecho varios ajustes e innovaciones para el corto y mediano plazo. Entre las más importantes, está la introducción del coche eléctrico. Los modelos en esta categoría no solo muestran un creciente interés por las energías renovables entre las mismas compañías. También representan una compleja decisión de inversión para la gente. Esto porque todavía son modelos comparativamente caros a los coches tradicionales.

¿Cuál es la mejor forma de elegir un auto eléctrico, entonces, para el futuro? Probablemente una buena estrategia sería comprar el modelo que menos se deprecie en el mediano y largo plazo. Es decir, que aún si se le quiere vender, todavía conserve buena parte de la valuación que tenía en el inicio. En este sentido, no todos los coches son iguales. Y según un reporte de Vanarama, hay dos modelos en específico que son los que le convienen más a los usuarios.

Según la plataforma, el Audi e-tron es el auto eléctrico que más vale pasadas las cinco mil millas recorridas (ocho mil kilómetros), con una caída de 12 por ciento de su costo original. Pero una vez pasadas las 100 mil millas (160 mil kilómetros), es el Model X de Tesla el coche que mejor se conserva, con una caída de solo 28 por ciento. Según cuánto tiempo los usuarios piensen darle uso a sus vehículos, éstos dos serían la inversión más inteligente a largo plazo.

La decisión del mejor auto eléctrico

Este análisis resulta relevante considerando cuánto énfasis la industria automotriz le ha puesto al desarrollo de estos modelos. A finales del año pasado, Volkswagen dijo que trabajaría en un auto eléctrico de “bajo costo”, comparado con otras opciones de la industria. Empresas como Lincoln han sumado esta tecnología a sus esquemas de negocio más tradicionales. Y agentes al estilo de Renault se enfocarán en los vehículos en los mayores mercados de todo el mundo.

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Hay que analizar los números de Vanarama con cuidado. Si bien porcentualmente un auto eléctrico como el etron o el Model X no se deprecian tanto como otros, la pérdida de valor a una escala nominal aún es significativa. La compañía de hecho analizó qué tan rápido se va reduciendo la valuación de estos modelos en comparación con motores de diesel. Y lo cierto es que los coches de batería todavía se desgastan, económicamente, mucho más rápido.

Lo anterior representa un reto para las automotrices. Deben trabajar para que sus modelos se conserven valiosos a lo largo de su vida útil, o bien para reducir su costo inicial y así la baja no sea tan significativa. De lo contrario, el incentivo para comprar un auto eléctrico entre toda la audiencia seguirá siendo bastante baja. En lo que se refiere a los consumidores, deben pensar con cuidado qué pesa más, si el costo de la innovación o el impacto para el medio ambiente.

El entorno automotriz

Como ya se ha dicho, las compañías del sector han invertido mucho para reforzar su oferta de este tipo de modelos. La marca china Xpeng Motors lanzó hace poco un auto eléctrico que podría rivalizar fácilmente al Tesla Model X, uno de los más populares a escala global. Porsche, por el contrario, ha mostrado en otras ocasiones su pesimismo ante la viabilidad económica del sector. En cambio otros, como Subaru, se han propuesto reforzar sus metas comerciales.

A pesar del pesimismo de algunos, muchos agentes creen que el auto eléctrico tendrá un muy provechoso futuro. De acuerdo con NS Energy, se espera que para 2030 representen más del 10 por ciento de la producción global de vehículos ligeros. Markets and Markets, por su lado, cree que en los próximos 10 años debería crecer en un 21.1 por ciento compuesto promedio anual. Y LMC cree que, junto a los híbridos, abarcarán casi la mitad de todo el mercado.