• Se cree que el ciberataque fue causado por un ransomware del tipo Snake

• Estos malware suelen utilizarse para “secuestrar” la información de empresas e individuos, encriptándola

• Muchas  operaciones de Honda dependen en los datos que se  cifraron, por ello tuvo que detener sus actividades 

Muchas veces se ha advertido a las empresas de todo el mundo la importancia de tener una serie de protocolos de protección informática. Y es que un ciberataque no solo puede costarle a las compañías millones de dólares (mdd) en información y operaciones perdidas. Además es un incidente que puede afectar a cualquier agente de la industria. No solo los negocios mucho más pequeños son vulnerables. Incluso las mayores marcas del mundo pueden caer ante uno.

Así lo demuestra el ejemplo de Honda. De acuerdo con AP, la automotriz informó ayer en la tarde de un significativo ciberataque que afectó sus operaciones a una escala global. En su cuenta oficial de Twitter para atención al cliente, la empresa apuntó que varias de sus unidades estaban fuera de servicio. No se cree que se haya sufrido una filtración de datos personales de sus clientes o colaboradores. En un inicio, se reportó que el incidente no afectaría su negocio.

At this time Honda Customer Service and Honda Financial Services are experiencing technical difficulties and are unavailable. We are working to resolve the issue as quickly as possible. We apologize for the inconvenience and thank you for your patience and understanding.

— Honda Automobile Customer Service (@HondaCustSvc) June 8, 2020

Sin embargo, de acuerdo con The Verge, el impacto de este evento podría haber sido aún más grande de lo que se había previsto al inicio. Varias de las instalaciones de producción de la automotriz tuvieron que cerrarse temporalmente para contraatacar el ciberataque. También se reportó que algunas de las oficinas de la empresa en atención al cliente y servicios financieros estaban cerradas. A la vez, Honda dijo que muchas de estas medidas se revirtieron rápido.

¿Un ciberataque puede acabar con una compañía?

El tema de la seguridad informática se ha vuelto cada vez más urgente para las marcas en todo el mundo. Dentro de México, se estima que menos de una cuarta parte de las empresas tienen las herramientas e infraestructura para defenderse de un ciberataque. Conforme se va haciendo más popular el home office, también incrementan los riesgos de manipulación a la distancia. Y marcas como Nintendo han sido recientemente víctimas de estos incidentes.

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¿Sería posible que un ciberataque pueda dejar fuera de combate a una compañía entera? Hay que destacar que el caso de Honda, aunque relevante, no parece que haya estado cerca de realmente condenar a la empresa. Parece que el impacto fue limitado y se contuvo con relativa rapidez. Sin embargo, aún es posible que una empresa más débil o un programa más potente aparezcan y sucumban ante un episodio parecido. Lo más aterrador es que no sería difícil.

Un ciberataque solo tendría que bloquear la capacidad de una empresa para operar de forma efectiva varias de sus unidades de negocio. Por ejemplo, no registrar adecuadamente varias transacciones o deshacer por completo sus bases de datos. Tal vez ni así se pueda matar de un día a otro a una empresa. Pero el costo de reparar estos daños informáticos, más todas las ventas perdidas mientras se repara el desafío, sí serían mortales. Por ello hay que protegerse.

Inversión en ciberseguridad

Por desgracia, ha habido un sinfín de advertencias en el pasado y las empresas no dejan de sufrir un ciberataque tras otro. A inicios del año se reveló que el mismo Jeff Bezos fue víctima de un malware controlado por Arabia Saudita. Ya desde 2018 se sabía que el 60 por ciento de las compañías que eran víctimas de estos incidentes simplemente quiebran. Incluso hay casos de naciones enteras que se deciden a llevar a cabo asaltos contra las mayores organizaciones.

¿Qué pueden hacer las empresas para reducir el impacto de un ciberataque? Es relativamente sencillo. De acuerdo con The Capacity Group, es crucial entrenar a los empleados en torno a buenas prácticas de ciberseguridad, y evitar que sean vulnerables a técnicas psicológicas. En datos de Cybersecurity Insiders, también vale la pena generar respaldos constantes de toda la información clave. Y según EBN, vale la pena invertir en sofisticado software de protección.