• La mujer que descubrió el dispositivo de Samsung lo publicó en Facebook para que el mundo lo pudiera ver

• En un inicio, la persona creyó que el proyecto de la marca era en realidad un satélite cualquiera

• Al respecto del incidente, la empresa surcoreana reafirmó que ninguna persona salió herida

En lo que se refiere a iniciativas comerciales extravagantes, más de una marca llega a la mente. KFC, con motivo de la temporada de fútbol americano en Estados Unidos (EEUU), lanzó un servicio de suscripción de pollo. Reebok, para atraer la atención de la Generación Z, ha puesto su dinero en campañas que son simplemente extrañas para la mayoría de la gente. Otras, como Burger King, no temen hasta patrocinar una boda para ganar algo de publicidad.

La frecuencia de estas ideas en una marca responde a cómo la gente reacciona hacia las iniciativas comerciales tradicionales. A inicios de 2019, The Drum decía que la aceptación del público hacia los anuncios era de apenas 25 por ciento. Otros estudios apuntan que, a menos que haya una interacción de la gente, estos proyectos son vistos como de poco valor, o hasta ignorados, por la audiencia. Otras investigaciones documentan un recibimiento más mixto.

Si bien este fenómeno ha hecho que más de una marca incremente su apuesta por el concepto de sus campañas comerciales, no está libre de complejidades. Entre más extraña y fuera de lo convencional sea una iniciativa publicitaria, es más difícil de controlar. Y si una campaña termina por estrellarse súbitamente, ¿vale la pena apostar por estas ideas distintas? Samsung está a punto de averiguarlo, de la forma más literal posible, con su Space Selfie.

Una iniciativa que se estrelló en el suelo

Hace unos días, la marca inició un ambicioso proyecto publicitario. Samsung, a través de su Space Selfie, quería enviar la “primer selfie en el espacio” en uno de sus nuevos teléfonos Galaxy S10 Plus. Para eso, pidió ayuda a la actriz y modelo Cara Delevingne para ser la protagonista de la histórica foto. Después, utilizó un globo espacial para lograr la hazaña. Incluso invitó a los fans de su compañía a mandar sus imágenes para sumarse al proyecto.

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Sin embargo, de acuerdo con The Verge, la iniciativa de la empresa acaba de estrellarse, literalmente. Aparentemente el aparato de la marca regresó a la Tierra este fin de semana en una granja de Michigan. La dueña del terreno llamó al 911 para reportar el incidente. Una vez que se supo exactamente lo que había pasado, Samsung llegó a recuperar su proyecto. En declaración a la NBC, la surcoreana dijo que se trató de una acción planeada con anticipación.

¿Crisis para la marca?

No es la primera vez que una marca realiza una campaña publicitaria que implica un viaje al espacio. Under Armour y Virgin Galactic realizaron hace unos días una alianza para empezar a capitalizar la exploración turística más allá de la atmósfera. En mayo pasado, Xiaomi lanzó uno de sus smartphones para tomar una de las primeras fotos con un teléfono móvil en el entorno. Incluso hay empresas que, como SpaceX, lograron privatizar la construcción y uso de cohetes.

Más allá de la relación entre empresas y el espacio, esta iniciativa de Samsung es interesante por las posibles consecuencias que podría tener para la surcoreana. Es incierto si la compañía en realidad pensaba que su dispositivo se estrellara en el lugar y momento que lo hizo. Sin embargo, sí parecería que se trató de un accidente del que no tuvieron control alguno. Esto, por sí solo, puede ayudar a afectar la reputación de la marca como un agente responsable.

Por otro lado, también afecta la credibilidad publicitaria de la marca. El proyecto de Space Selfie fue diseñado para precisamente demostrar que la empresa también podía realizar proyectos extravagantes y llamar la atención de la audiencia. Un final tan inesperado y caótico para esta campaña en realidad no muestra una gran capacidad para manejar estas iniciativas. En este sentido, su reputación como líder de marketing también podría verse muy afectada.