El visionado de videos digitales en Europa Occidental se está convirtiendo en algo cada vez más común, sin embargo en los cuatro principales mercados continentales, Alemania, España, Francia e Italia, existen notables diferencias en sus hábitos de consumo.
Notas relacionadas:
Por primera vez, el acceso a internet supera los 100 minutos diarios
¿Qué interesa a los consumidores de los coches conectados a internet?
Los servicios de compra por internet y entrega a domicilio continúan ganando terreno
Según las investigaciones de eMarketer, “Western Europe Digital Video Trends: North-South Divide Separates the Most Digital from the Most Valuable”, la primera diferencia entre norte y sur en materia de consumo de video se relaciona con la influencia de la TV tradicional. En Francia y Alemania, la programación de televisión es la que aun consume mas tiempo de los usuarios y la TV es aun visto como el principal aparata para el visionado de videos. Mientras que en el caso de Italia y España, a pesar de que la televisión sigue siendo importante a la hora de consumir pantalla, los usuarios se decantan cada vez más por las plataformas digitales.
De hecho, un estudio de Octubre de 2014 de la Oficina de Comunicación de Reino Unido, encontró que los usuarios españoles e italianos eran más propensos a acceder a los programas de televisión, de forma digital, que los usuarios alemanes y franceses. Una diferencia que se incrementa cuando se trata de películas, pues en España se accede digitalmente a estas en un 70 por ciento de los casos y en Italia en un 72 por ciento, mientras que en Alemania y Francia se hace en casi la mitad de lo citado en ambos casos.
Mientras tanto, el como los consumidores están viendo este contenido, esto es, a través de que dispositivos, destaca la omnipresencia de los métodos mobile y particularmente los teléfonos móviles en el sur. Mientras que las tabletas son una forma popular para el consumo de contenido de video en Europa Occidental, en el sur un 68 por ciento utiliza smartphones para ver videos en Italia, mientras que un 55 por ciento lo hace en España.
La otra forma en la que los hábitos de consumo de video varían entre el norte y el sur está relacionada con el tipo de contenido que están viendo y por el que, muy importante, están pagando. Esto está parcialmente vinculado a la preferencia de las pantallas, así como a factores económicos.
En Francia y Alemania, hay mucha mayor disposición a pagar por videos producidos profesionalmente y luego verlos en un ambiente de Tv. Mientras que en España e Italia las mayores limitaciones son económicas y quizás la preferencia por consumir contenido gratuito vía mobile. Lo que da una pista a la industria sobre los mercados más dispuestos a pagar por estos servicios y productos.
