• Una buena cultura organizacional permite a las empresas tener empleados más satisfechos y productivos

• Asimismo, puede ser una buena idea de negocio porque en teoría ayuda a identificar oportunidades comerciales con facilidad

• No solo eso, sino que es un requisito indispensable para crear lazos más fuertes entre consumidores y organizaciones

Por años, las empresas han reconocido la importancia de la cultura organizacional dentro del mercado. No solo es un concepto intrínsecamente relacionado con el éxito de negocio. A la vez, es un aliado indispensable para ejecutar planes de modernización y mejora continua. Y en el contexto del entorno post-pandemia, su importancia se ha exaltado todavía más que antes.

La razón es simple. A raíz de la COVID-19, todo el público quedó mucho más consciente de que las empresas tienen el potencial de ejecutar el cambio social y económico. Además, ser parte de una cultura organizacional puede dar sentido de pertenencia y propósito que mejore la productividad. Para trabajar en un entorno positivo, Hubspot tiene cuatro sugerencias:

Tener posturas ante injusticias sociales: La base de una cultura organizacional firme

Hoy en día, las comunidades más fuertes se forman en torno a intereses comunes. Y como ya se dijo, la crisis de la COVID-19 ha provocado que se preste más atención que nunca antes a los temas más difíciles de la vida en sociedad. Lo anterior incluye el racismo, la pobreza, o el cambio climático. Así pues, las empresas deben definir bien sus posturas en esos entornos.

No solo eso, sino que la cultura organizacional se puede fortalecer aún más cuando se tiene un plan de acción claro que aborde directamente estas problemáticas. No basta con no ser parte del problema, ni con exigir cambios o pronunciarse. La verdadera afinidad con el equipo llega cuando se sienten empoderados para cambiar cómo funciona el mundo a su alrededor.

Respuestas empáticas a la COVID-19: Entendiendo a la gente

Por más que a las autoridades o algunos agentes les gustaría decir que la pandemia ya se ha acabado, la realidad es que aún hay mucho por vencer. No solo la mayoría de las naciones del mundo aún no tienen protegida a su población. Mientras no exista una vacunación global, no dejará de existir un riesgo sanitario. La cultura organizacional debe reflejar ese conocimiento.

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No solo eso, sino que también se deben crear políticas que entiendan cómo cada miembro de la organización está lidiando con la COVID-19. Si bien hay muchos trabajos que se llevan a cabo mejor de forma presencial, las empresas que quieran crear una cultura organizacional fuerte voltearán a ver qué es mejor para su gente. No qué es más conveniente para el negocio.

Cultura organizacional e inclusividad: Oportunidades para todos

El punto anterior está muy ligado a este. De nuevo, no toda la gente vive bajo condiciones que sean iguales a las del resto. Hay brechas entre colaboradores que pueden afectar su trabajo a escala personal y profesional. Más que exigirle a cada individuo que se esfuerce lo posible por cumplir un estándar general, hay que darles las facilidades para sacar el brillo de cada uno.

Lo anterior se puede expresar de mejor forma en los nuevos formatos de trabajo flexible. Si se le da a la gente la libertad de escoger entre ir a la oficina, tener un esquema híbrido o laborar desde casa, no solo se puede desbloquear mejor su potencial. También es mucho más fácil crear una cultura organizacional que realmente permita abrir las puertas para toda la gente.

Escuchar a la comunidad: Clave para interacciones positivas

Finalmente, una cultura organizacional solo puede crearse eficazmente cuando hay un rebote entre los líderes y el resto de la empresa. Es a través de estos esquemas de retroalimentación que se pueden reconocer claramente las necesidades y exigencias de cada agente. Y por consiguiente, tener bien claras las expectativas y soluciones que se necesitan en el futuro.

Además, la libre comunicación, por sí sola, puede crear una buena cultura organizacional. Lo anterior, porque las empresas que permiten la circulación de ideas de arriba hacia abajo y en viceversa naturalmente generan confianza y cercanía. Así pues, es importante que todas las marcas recuerden, en todo momento, que necesitan estar en contacto con su comunidad.