• Los gastos de capital de Walmart incrementarán en un 27 por ciento en 2021, en comparación a la cifra registrada para 2020

• Por el contrario, se espera que sus ventas aumenten en apenas un dígito porcentual bajo este año, frente al 8.5 por ciento de los últimos 12 meses

• Incluso las ganancias por acción se mantendrían igual, o tal vez con un ligero ajuste positivo, en lugar del 2.2 por ciento que esperaba Wall Street

Es evidente que a Wall Street no le interesan más que los resultados en el corto plazo. De acuerdo con Reuters, Walmart acaba de presentar sus expectativas de rendimiento para el próximo año. La retailer advirtió que tanto sus ventas como sus ganancias deberían crecer a una menor velocidad, frente al avance que tuvieron durante 2020. Como resultado, sus títulos se desplomaron en hasta 5.6 por ciento en la bolsa, un reflejo de la negatividad del mercado.

Las reacciones de Wall Street no han sido del todo justas con Walmart. La empresa explicó que parte de la razón por la que se reduciría el crecimiento en sus ganancias es que iba a iniciar una estrategia de reinversión más agresiva en 2021. Su CEO Doug McMillon señaló que trabajarán en incrementar su capacidad y sus sistemas de automatización. El objetivo es, en sus propias palabras “ganarnos el lugar como el principal destino de todos los consumidores”.

También se harán algunos ajustes a la remuneración de sus empleados. Walmart espera subir el salario por hora de sus trabajadores en Estados Unidos a 15 dólares en promedio. La idea es que esta cifra beneficie a más de la mitad de los colaboradores que laboran en ese formato. Sin embargo, aceptó que algunos roles empezarán con una remuneración de solo 11 dólares la hora. Entre el aumento y su proyecto de inversión, gastará 14 mil millones de dólares (mdd).

Sacando una página del libro de Amazon

No es del todo inesperado que Wall Street esté reaccionando negativamente a los planes y las nuevas expectativas de crecimiento de Walmart. De acuerdo con CNBC, la ventas e ingresos de la retailer se dispararon durante el periodo más intenso de la pandemia. En gran parte, por la reacción inmediata de los consumidores a acaparar productos en caso de una emergencia. Y también por el rendimiento de sus canales ecommerce, que crecieron en popularidad.

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Así pues, no es sorpresa que los inversionistas quieran seguir viendo los mismos resultados en el mediano plazo. Pero es interesante que castiguen a Walmart aún cuando ejecutará una estrategia muy similar a la que caracterizó a su mayor rival, Amazon, por mucho tiempo. De acuerdo con el New York Times, la empresa de Jeff Bezos utilizó casi todos sus ingresos en mejorar su negocio por año. Esto la convirtió en una amenaza significativa en el sector retail.

Y es aparentemente lo que quiere hacer Walmart. Algo que Wall Street le debería aplaudir, si se consideran los éxitos que la retailer ha tenido en los últimos meses en anteriores proyectos de modernización. De acuerdo con Automation World, el concepto de centros de entregas locales automáticos inició dentro de la marca a finales de 2019. Ha sido tan exitoso, que la retailer pretende multiplicar su presencia en EEUU en el corto plazo, con docenas de nuevos lugares.

Las ambiciones de Walmart en automatización

Tampoco se puede decir que la retailer haya agarrado a Wall Street de sorpresa, lo que llevó a la penalización de la compañía en la bolsa. Walmart tiene un sinfín de proyectos de inversión centrados en la automatización que han comenzado desde hace años. Y cada vez se vuelven más ambiciosos. A inicios del año pasado, dijo que empezaría a “contratar” a más robots para reducir los costos de operación y ayudar a empleados humanos en el análisis de inventarios.

Sin ir más lejos, en diciembre pasado Walmart anunció que usaría coches autónomos para sus entregas de productos en EEUU. Esto representa una expansión de un proyecto de prueba que empezó desde hace meses para dejar la distribución de pedidos a camiones que pueden manejarse sin ayuda. Para 2021, se extenderá el programa a más ciudades y se dejará de usar un conductor a bordo en caso de una emergencia, mostrando su confianza a esta tecnología.