• De acuerdo con los agentes que demandaron a WhatsApp, la empresa ahora quiere hacer “perfiles 360” de todos sus usuarios

• Asimismo, se le acusó a la empresa de tomar una serie de decisiones que no pueden aceptarse en una democracia funcional

• Como parte de sus esfuerzos para calmar los ánimos, la app ha dicho que los cambios solo aplican a las interacciones con negocios

Muchos usuarios ya han decidido que WhatsApp no vale la pena como servicio de mensajería luego de sus agresivos cambios en privacidad. Pero es evidente que las audiencias ya no se van a conformar con cambiarse a Signal o Telegram. De acuerdo con Reuters, se acaba de presentar una demanda en contra de la plataforma de Facebook. El caso asegura que los cambios representan una amenaza de seguridad nacional, pues roza en la vigilancia masiva.

Dicha demanda fue presentada ante una corte de India. El documento señala que se trata de un asunto de seguridad nacional porque implica no solo compartir sino guardar los datos de los usuarios en otro país. Estas acciones, expone el recurso legal, están regidas por estrictas leyes en el entorno de Relaciones Exteriores. Asimismo, expone que la decisión de WhatsApp representa una “burla al derecho fundamental a la privacidad”. El caso se evaluará el viernes.

Cabe destacar que la India es el mercado más grande que tiene WhatsApp en todo el mundo, con más de 400 millones de usuarios. Como en otras partes del mundo, muchos empezaron ya a migrar a otras plataformas de mensajería, como Signal y Telegram. Por su lado, la unidad de Facebook ha tratado de calmar las preocupaciones y miedos de privacidad de los usuarios. Entre otras cosas, ha aclarado que no se vigilarán chats de grupos o con los amigos y familia.

¿Primera de muchas demandas contra WhatsApp?

Si bien es la primer demanda que recibe la app de mensajería, ya está bajo la lupa de al menos un gobierno por sus cambios de privacidad. De acuerdo con Bloomberg, hace unos días que las autoridades de Turquía comenzaron una investigación contra WhatsApp. Los funcionarios argumentan que esta nueva práctica representa una acción anti-competitiva en el mercado. Pero activistas argumentan que podría ser una excusa para censurar a grupos de oposición.

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Lo cierto es que las nuevas políticas de WhatsApp en cuestión de privacidad tardaron mucho en llegar. Esta plataforma de mensajería, como lo expone Investopedia, desde 2016 que no tiene ningún modelo de monetización claro. Muchos expertos aseguran que el valor que le ve  Facebook está precisamente en la recopilación de información de los usuarios. Así pues, una mayor explotación de estos datos para potenciar su margen de ganancias era un paso obvio.

Pero es el peor momento para que Facebook decida sacrificar un poco de la privacidad de la app por márgenes de ganancia mayores. De acuerdo con Forbes, hay un creciente miedo entre la población sobre la forma en la que se manejan sus datos e información personal. En promedio, 69 por ciento no confía en la forma que las app recolectan sus insights. En este sentido, la demanda en India no solo luce inevitable. Además, podría ser apenas la primera.

Un problema que no es único de esta app de mensajería

Aunque WhatsApp está ahora en el ojo del huracán, la monetización de la información es en realidad una costumbre relativamente común entre las plataformas de tecnología. No hay que irse más lejos a los cambios que anunció Twitter en abril pasado. Similar a la plataforma de mensajería, advirtió que iba a desactivar algunas opciones de privacidad y activarlas para el público en general. Esto, con el objetivo de darle todavía más valor a los anunciantes de la red.

También se puede hablar de algunos de los cambios que sopesó Zoom durante su periodo de contingencia y mejora después de su crisis de privacidad a inicios de la pandemia. La app liberó una serie de mejoras a la protección de la información de los usuarios. Sin embargo, en un inicio, consideró aplicarlas solo para los consumidores que tuvieran su suscripción pagada. Al final decidió implementar los cambios a toda su audiencia, pero aún sirve como un ejemplo.