Santiago, Chile.- Una estrategia de marketing terrorífica fue la que vivieron los asistentes al pre-estreno de Poltergeist en un mall de la capital. Con un placement “demasiado real”, la productora encargada de la promoción logró traumatizar a parte del público y hacer reír a más de 217 mil personas que, en cuatro días ya han visto el trailer y la acción.

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Suele suceder. Cada vez que se estrena o reestrena una película de terror, los creativos inventan la forma de poner en situación a los futuros espectadores y aunque ya debieran existir algunas sospechas sobre los pre estrenos de este género, la gente sigue cayendo en la trampa.

Y es que la sorpresa puede generar una reacción de miedo, aún cuando juremos que somos incrédulos. Ante la aparición de zombies, vampiros o criaturas desconocidas en medio de la oscuridad, el cerebro sólo reacciona con espanto, la lógica viene después.

Por lo mismo, al ver y prever ese tipo de situaciones en un video, el usuario tiende a disfrutar de la historia y a reír de buena gana. Entonces, no es extraño que la acción, grabada para conseguir un buen número de comentarios pro- película, se haya viralizado.

Una promoción simple, con recursos básicos, pero que apela a los instintos y eso nunca falla.