- Las ventas de Mitsubishi Motors en China se desploman, lo que lleva a la suspensión indefinida de la producción y a recortes de personal.
- La empresa japonesa lucha por adaptarse a la transición hacia los vehículos eléctricos.
- En China, enfrenta una feroz competencia con las marcas locales.
Mitsubishi Motors tiene un gran problema en el mercado automotriz chino: las ventas se derrumban. Lo que ha llevado a la empresa nipona a la suspensión indefinida de su producción en ese país y, obviamente, a la necesidad de recortar personal.
El fabricante japonés viene luchando desde hace tiempo por adaptarse a la transición hacia los vehículos eléctricos en el mercado automotriz más grande del mundo, pero no está teniendo éxito.
Esta retirada de Mitsubishi se produce en un momento en que los fabricantes de automóviles extranjeros se enfrentan a una competencia feroz con las marcas locales chinas.
De hecho, la semana pasada, el director ejecutivo de una rival de Mitsubishi, Mazda, advirtió que el mercado chino está entrando en “una fase en la que solo los más fuertes van a sobrevivir”.
Las ventas de Mitsubishi y los tropiezos en China
Según informes de medios locales, Mitsubishi ya les dijo a los accionistas, en colaboración con Guangzhou Automobile Group (GAC), su empresa conjunta en China, que está “explorando una revisión de su estrategia” y una “optimización de la fuerza laboral”, aclarando que no se está yendo del gigante de Asia de forma completa. Al menos, por ahora, publica Financial Times.
GAC, en un comunicado, dijo que sus accionistas están haciendo “todo lo posible para proteger los derechos e intereses legítimos de los empleados”.
Ventas de autos japoneses en China
Las ventas de automóviles japoneses en China se han visto gravemente afectadas por el lento avance de la tecnología de vehículos eléctricos por parte de los fabricantes nipones y una guerra de precios impulsada por Tesla.
Según la Asociación de Automóviles de Pasajeros de China (CPCA), en junio de 2023, la participación de las marcas japonesas en el mercado automotriz chino cayó al 17 por ciento, en comparación con el 21 por ciento del mismo mes de 2022.
La producción en China de la empresa conjunta de Mitsubishi con GAC se detuvo en marzo después del fracaso de las ventas de su nuevo SUV Outlander a gasolina.
Mitsubishi aún no ha llevado al mercado chino un vehículo eléctrico puro y su fábrica en Changsha produjo sólo 3.300 vehículos en los primeros cinco meses de 2023, una baja del 75 por ciento en la comparación interanual.
Toda la región está siendo un problema para Mitsubishi Motors, que informó de un retroceso del 40 por ciento en las ventas de autos en China, Taiwán y Hong Kong.
Mitsubishi no está sola en esto. A comienzos de 2023, la empresa conjunta de Honda con GAC dijo que dejaba de producir y vender automóviles bajo la marca de lujo Acura, propiedad de ese holding nipón.
En 2018, GAC Mitsubishi Motors llegó al máximo de ventas en China, con 144 mil unidades. En 2022, apenas entregó 33.650.
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