A lo largo de los años hemos aprendido que las marcas que ofrecen una interacción sencilla, sin propuestas de valor complicadas y una experiencia diseñada pensando en el cliente, tienen clientes que las prefieren por encima de otras. ¿Pero si todos sabemos esto, porque es tan complejo lograrlo? Como citaba Steve Jobs: “La simplicidad es la máxima sofisticación. Se necesita mucho trabajo para hacer algo simple, para comprender realmente los desafíos subyacentes y encontrar soluciones elegantes. No es sólo minimalismo o la ausencia de desorden. Se trata de profundizar en la complejidad. Para ser verdaderamente simple, tienes que ir muy profundo. Tienes que entender profundamente la esencia de un producto para poder deshacerte de las partes que no son esenciales”. Los resultados en el caso de Apple son conocidos por todos.

De acuerdo con el estudio publicado por la revista Entrepreneur se menciona que el 61% de los encuestados respondieron a que si están dispuestos a cambiar a una marca que ofrezca una experiencia más sencilla. Por esto es crítico que las marcas piensen en la simplicidad ya que ayuda además a tener clientes más leales en el largo plazo.

Un pobre diseño de producto daña la lealtad de los clientes

Cada vez más personas interactúan digitalmente para llevar a cabo muchas actividades que anteriormente se hacían en el mundo físico: pago de facturas, servicios, transferencias bancarias, compra de productos en línea incluso hasta inversiones en la bolsa y otras actividades que hace algunos años atrás se pensaba imposible llevarlas en otro lugar que no fuera una sucursal bancaria, tienda, local comercial, etc. Si la experiencia de usuario para llevar a cabo estas actividades está mal diseñada, es compleja o con fricciones, es lógico pensar que los clientes irán perdiendo confianza en la solución y por lo tanto buscarán otras alternativas.

El cliente siempre tiene la razón

Las calificaciones y reseñas de una aplicación son muy reveladoras. Los usuarios tienen el poder de hacer o deshacer la reputación de una empresa únicamente a través de las reseñas en línea. Es importante mirar bien los comentarios que los usuarios otorgan a las apps. Echa un vistazo más de cerca de la sección de reseñas y verás que muchas personas se quejan de que una aplicación no funciona, o de que el diseño tiene fallas y hace que incluso las tareas más simples sean más complicadas.

Un buen UX será capaz de crear defensores de la marca ayudando a incrementar la lealtad

Tener “social engagement” significa que cuando el usuario tiene una interacción de uso positiva, la compartirá con el mundo. Si no pueden interactuar positivamente entonces puede ser que el UX está causando que se pierdan defensores de la marca. Tener clientes que refieran a la marca es otro sello de confianza que significa que el cliente aprobó la experiencia y está dispuesta a referirla con sus amigos y familiares.

Cuando se trata de simplicidad, a menudo menos, es más. En lugar de tratar de incluir tantas funciones como sea posible en el producto, es concentrarse en la funcionalidad principal que los usuarios realmente necesitan. Esto hará que el producto sea más fácil de usar y reducirá el riesgo de vulnerabilidades.

Las marcas que simplifican el proceso de compra retienen de mejor forma a los clientes

Un estudio hecho por CEB (Corporate Executive Board, una firma parte de Gartner) publicó que las marcas que ayudan a los consumidores a simplificar su proceso de compra tienen un 86 % más de probabilidades de retener clientes leales y un 115 % más de probabilidades de ser recomendadas a otros.