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Ford ha reabierto en Estados Unidos y los casos de COVID-19 han regresado a sus plantas, generando un debate.
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La pandemia ha obligado a las industrias a replantearse sus operaciones.
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La industria automotriz se ha visto ampliamente impactada por la pandemia de COVID-19.
Un elemento que no podemos perder de vista en medio de la pandemia de COVID-19, es lo importante que es seguir los protocolos para lograr que el contagio del nuevo coronavirus sea mínimo y poder mantener actividades productivas en medio de la situación que estamos viviendo.
Un elemento que no podemos perder de vista en medio de estos esfuerzos, es que si bien se permite la actividad laboral, esto no significa que la pandemia haya acabado, pues el riesgo sigue siendo el mismo, por lo que las empresas tienen que estar preparadas para lograr que la “nueva normalidad” pueda llevarse de manera adecuada.
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Ford reabre y registra de nueva cuenta casos de COVID-19
Ford ha reabierto sus pautas y con ello el coronavirus ha regresado a sus empleados. A tan solo una horas de haber reabierto en Estados Unidos, suspendió las actividades en una planta de montaje de Dearbon, Michigan, luego de que un empleado diera positivo al patógeno, lo que paralizó la producción de este miércoles.
Dentro de esta planta se produce la pickup F-150, mientras que el martes suspendió labores en su planta de Chicago, luego de que dos empleados dieran positivo al nuevo coronavirus. En esta planta se ensamblan la Ford Explorer, Lincoln Aviator y Police Interceptor.
Estos lamentables incidentes ensombrecen los esfuerzos por reactivar la economía, durante la contingencia que estamos viviendo por el nuevo coronavirus, estableciendo una serie de retos que deben de enfrentar las marcas hoy en día, sobre todo la automotriz, que ha sido una de las más afectadas por este fenómeno.
Los casos son un gran recordatorio de que el retorno a actividades durante esta contingencia no significan que la pandemia ha acabado, por el contrario, son una importante alerta de lo necesario que es contar con protocolos que ayuden a minimizar el contagio de este patógeno, pues el riesgo de contraerlo sigue siendo el mismo.
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Tesla y su polémica reapertura
Mientras Ford ha registrado problemas en su reapertura, Tesla ha sido una marca con grandes polémicas por exigir los permisos que le dieran la posibilidad de reaperturar y continuar con sus actividades en su planta de California.
La marca automotriz provocó todo un debate internacional cuando anunció que quitaría su planta de California, ante la negativa de autoridades locales por permitirle la reoperación, a pesar de que a nivel federal ya se había permitido a la industria automotriz el regreso a actividades.
Esto generó un intenso debate que a la fecha se convirtió en un interesante recordatorio de lo relevante que es una marca automotriz en el escenario económico.
Las industrias en contingencia
La contingencia ha obligado a que las marcas establezcan estrategias a través de las cuales puedan migrar a nuevas categorías de venta.
Un elemento que no podemos perder de vista es el que nos advierte el papel que juega la innovación en plena contingencia. Esto es una dosis de oportunidad que han encontrado las marcas durante estos momentos, aunque ha sido limitado, pues operaciones tradicionales como el ensamble de autos no han encontrado alternativas para poder operar con empleados en resguardo, por lo que la cadena de producción y distribución tiene ante si un reto todavía en el cual trabajar.
