Las acusaciones en contra de Morgan Freeman, de cometer al menos ocho actos de acoso sexual contra diversas mujeres ya comenzaron a tener repercusiones en su imagen y vida de negocios.

El actor estadounidense se suma a una lista de personalidades que sigue creciendo y que pone en crisis a toda la industria del entretenimiento; el caso más representativo es el del ex productor Harvey Weinstein, acusado de violación y otros delitos sexuales quien se entregó este viernes ante las autoridades.

En el caso de Morgan Freeman, fue señalado por ocho mujeres sobre presunto acoso sexual, según denuncias dadas a conocer por la cadena CNN. Y, la revelación de las acusaciones, el actor de 80 años -también en declaraciones a la cadena- pidió perdón a quien se haya “sentido incómoda o tratado sin respeto”.

Sin embargo, la industria y las marcas ya están muy sensibles ante el tema, por lo que la reacción no se ha hecho esperar. Visa es una de las marcas que ha decidido suspender sus relaciones de negocios, recordemos que Freeman era protagonista de varias acciones de marketing de la compañía especializada en servicios de pagos electrónicos.

A Visa, se suma TransLink, el sistema de tránsito de Vancouver, con el que el actor había acordado una colaboración para ser la voz oficial del servicio público de transporte de la ciudad canadiense.

Las acusaciones, sean veraces o no, no dejarán de ser un impacto muy duro a la imagen y reputación del actor Morgan Freeman, quien tiene una larga trayectoria en el cine (trilogía de Batman de Christopher Nolan) y televisión (es host de National Geographic Channel), así como en el mundo de la publicidad (spot de Doritos y Mountain Dew para el Super Bowl).

La imagen pública y la reputación de una marca son factores de suma importancia para mantener la lealtad y el engagement de esta ante su público. Sin embargo, un escándalo o conflicto que involucre la imagen de una empresa puede representarle el deterioro de su legitimidad. Esto es lo que le está sucediendo al actor estadounidense.

Y, es que movimientos como #MeToo, que han apoyado actrices de renombre y trayectoria, incluso por mujeres importantes de la política como Congresistas y Senadoras, busca dar una voz que sea escuchada y que buscan acabar con este tipo de agresiones que han sufrido cerca del 35 por ciento de las mujeres de todo el mundo (algún tipo de violencia física y/o sexual) de acuerdo con datos de ONNU Mujeres.