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Cámaras de seguridad exhiben a repartidor de Sabritas haciendo robo hormiga

"Pequeñas" acciones maliciosas realizadas por trabajadores y consumidores afectan directamente en los ingresos de las empresas.

Un usuario ha subido un video de las cámaras de seguridad en su tienda, exhibiendo a un repartidor de Sabritas surtiendo mercancía incompleta.

De acuerdo con los resultados de los Censos Económicos 2019, en territorio nacional hay aproximadamente 574.141 tiendas de abarrotes, 6.067 supermercados y 53.553 minisúpers, los cuales venden diversos tipos de productos y alimentos. Para que estos logren recibir dichos productos, los proveedores deben estar constantemente enviando y surtiendo a estos negocios con dichos artículos cada cierto periodo de tiempo para evitar que estos se queden sin stock y de esta manera ambos pertenecientes logren aumentar sus ingresos; no obstante, hay un tema en particular que puede interferir en acción de compra/venta, el robo hormiga.

El robo hormiga es un tipo de delito cometido por trabajadores, visitantes e incluso proveedores de una marca, en el cual estos optan por llevarse llevarse algunos productos relativamente “sencillos” de ocultar o consumir, siendo este un problema bastante común, por lo menos en México. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (AMESP), este tipo de robos han logrado registrar pérdidas de hasta 24 mil millones de dólares de manera anual, por lo que, en efecto, es un problema que se vive día a día en la sociedad, dentro de un considerable número de tiendas y establecimientos.

Cámaras de seguridad captan a proveedor de Sabritas repartiendo incompleto

Un usuario en redes sociales ha expuesto a un repartidor de Sabritas gracias a una grabación de sus cámaras de seguridad, el cual parece estar haciendo robo hormiga ya que, mientras coloca sus respectivos productos en la tienda, este parece ocultar algunos que aún estaban en la caja y los vacía en otra, para posteriormente seguir surtiendo con otros y posteriormente se lleva ambas. Ante esto, el usuario etiqueta a Sabritas en Twitter y les menciona “no nos den, solo no nos quiten, ya cambiarme de vendedor por favor”.

En esta ocasión, las cámaras de seguridad de la tienda han sido de vital ayuda para encontrar al proveedor de Sabritas llevando a cabo este robo hormiga, demostrando la oportunidad de contar con este tipo de artefactos tecnológicos; no obstante, un sin fin de hechos parecidos suceden todos los días alrededor del país, donde los mismos negocios podrían no enterarse de esto, hasta el momento de registrar sus respectivas ganancias.

Esto sólo refleja la opinión del consumidor y la conversación que genera en el pulso digital, por lo que Merca 2.0 solicitó la postura de la marca con el fin de contar ambas versiones de la historia y respondió lo siguiente:

Tenemos conocimiento que un empleado de Sabritas fue filmado recientemente cometiendo actos que van en contra de nuestro Código de Conducta. Queremos señalar que hemos abierto un expediente para investigar este incidente y tomar las medidas conducentes.

Sabritas es una compañía con una sólida ética corporativa, por lo que todos nuestros colaboradores están obligados a seguir un estricto Código de Conducta para respetar a cabalidad los principios de la empresa y las normas y leyes de todos los países en los que operamos.

Los robos hormiga y las marcas

Este tipo de situaciones se muestran constantemente en los negocios de todo México, donde algunos de estos pueden no contar con cámaras de seguridad que permitan a los dueños de los establecimientos notar cuando están siendo una víctima más de este delito; no obstante, este tipo de casos no se remonta solamente por los trabajadores de las marcas, sino que también es una acción bastante común entre consumidores.

Ya sea mediante el hurto de productos dentro de las mismas prendas de los “clientes” o con algunas prácticas dentro de las tiendas donde se consume un producto en particular, se contribuye de igual forma a que las pérdidas de los negocios sigan en aumento.

Ejemplo de esto lo encontramos hace un tiempo cuando una clienta de Walmart exhibió un tipo de robo hormiga por parte de un consumidor, quien comió una parte de un pollo rostizado dentro de la tienda e incluso este lo dejó incompleto en sus pasillos, demostrando claramente que este no pagó el alimento, mencionando que “está bien comerse las uvas del Walmart bich@s, pero esto es otro nivel ya”.

“Pequeñas” acciones maliciosas realizadas por trabajadores y consumidores afectan considerablemente en los ingresos de las empresas.

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