Internacional.- Cada día, miles de personas piensan en cambiar de empleo por diversas razones. A veces no se sienten cómodos, les falta tiempo para vivir, odian a su jefe o ganan muy poco, pero sólo los menos dan las gracias por el trabajo que realizan. Es que todos queremos más y estamos en nuestro derecho de pedirlo, pero no deja de ser interesante mirar al lado y ver qué es lo que está haciendo el resto de la población. ¿Te gustaría cambiar de vida y tener uno de los 5 empleos más raros del mundo? Pura creatividad, a veces absurda, pero necesaria.
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¿Cuáles son las razones por las que las personas dejan su empleo?
Probador de comida para perros. Mark Gooley (en la foto del sitio Perthnow) trabaja probando comida para perros, con el convencimiento de que si algo no sabe bien para él, difícilmente será del gusto de su mascota. Como el perro no puede reclamar por el mal sabor, él tiene la primera palabra.
Chiclólogo. En realidad, la palabra no existe, pero podría identificar lo que hace Jesse Keifer, un químico de profesión que ha encontrado una forma distinta de ganarse la vida: saboreando chicles en Cadbury Schweppes para dar su visto bueno y recomendar qué producir a la multi millonaria empresa. No es malo, aunque la mandíbula del hombre probablemente crezca con los años.
Separador de pollos por sexo. Cuando los pollos nacen tienden a agruparse para no pasar frío, entonces el experto debe separarlos por sexo porque sólo las hembras son relevantes para la producción. Los machos son sacrificados. Señores, así es la vida.
Ordeñador de serpientes. El veneno de las serpientes tiene varios usos importantes en la medicina, incluyendo antídotos para la mordedura del mismo reptil. El problema es que alguien tiene que extraer el veneno. Ken Darnell se dedica a esto y dice que la única diferencia con otros medios de producción es que “aquí puede matarte”.
Supervisor de secado de pintura. Paul McCorkell tiene 39 años y parte de su trabajo consiste en mirar cómo se seca la pintura en una compañía de Sydney. “Me gusta controlar la pintura cada pocos minutos, evaluando cómo cambia su apariencia. Tenemos que asegurarnos que el cliente está contento, que la pintura se seca con una apariencia uniforme” explica al sitio News de Australia.