Los titulares, encabezados y como se le llama comúnmente en publicidad: las cabezas, son las que pueden tener el poder de atrapar la vista de tu cliente potencial y así ganar la batalla diaria por la atención. De eso se trata la publicidad, la comunicación, la mercadotecnia: de captar la atención.  

Todo lo anterior y lo que sigue, no es posible lograrlo si no conoces muy bien a tu cliente potencial, sus miedos, gustos, preferencias, etc.

La cabeza debe adelantarse y responder la pregunta, inconsciente o consciente, de tu cliente potencial: ¿qué hay aquí para mí? Si no la contesta, no va a leer tu anuncio, tu artículo, tu blog, tu correo, por mencionar algunos.

Lo recomendable es que la cabeza de tu anuncio, por ejemplo, le diga con claridad a tu cliente potencial qué ofrece tu producto o servicio, qué beneficio recibirá si lo adquiere. 

Si tu cliente busca una solución a un problema, una satisfacción a una necesidad o simplemente un placer específico, la cabeza debe comunicarle que tu producto le dará ese resultado.

Los clientes siempre tienen obstáculos u objeciones para comprar pues les representa un desembolso o un inconveniente especial. Tu cabeza debe resolver esto. Supongamos que la objeción del cliente es hacer un fuerte desembolso inicial para irse de vacaciones con su familia, entonces tal vez la cabeza debería decir algo como: “Lleva a los tuyos de vacaciones y dale meses de descanso a tu cartera.” Y en la subcabeza escribes, “Pago inicial en seis meses sin intereses y después, cómodas mensualidades.”  

Desmitifiquemos: no hay cabezas largas o cortas, las hay buenas o malas.

Escribe tu cabeza de manera clara y precisa. Tu lector debe comprender con enorme facilidad, en segundos, que es lo que le ofreces, qué gana si adquiere tu producto.

Tu cabeza también puede contener una llamada a la acción. Una invitación a hacer algo específico: comprar, reservar, inscribirse, llamar,… Deberá quedarle claro que consigue si atiende a ese “call to action”

Un buen copywriter, redactor publicitario, teniendo la información correcta y suficiente de tu cliente potencial, podrá escribir una cabeza que gane la batalla por la atención. Sabrá hacerlo pues conoce la técnica para lograrlo.

Gracias por leer hasta aquí, la cabeza de este artículo logró su objetivo.

Hasta el próximo miércoles.