Tras la finalización de la pasada Copa del Mundo la Confederaçao Brasileira de Futebol optó por reemplazar dentro de su roster de sponsors a la firma alemana Volkswagen, por la estadounidense Chevrolet, patrocinio que pese a no cumplir aún con el año de antigüedad ya ha reportado grandes beneficios para el organismo deportivo debido a la creciente inversión por parte de la firma automotriz