• Se espera que Diem, el nuevo nombre de la criptomoneda de Facebook, se concentre en desarrollar ciertas políticas de prevención

• Específicamente, se buscan crear sistemas que eviten el lavado de dinero, el financiamiento al terrorismo, entre otros crímenes financieros

• Diem es la palabra en latín para día, aunque es incierto por qué se eligió específicamente este término para reemplazar a Libra

A veces, cuando un proyecto está tan manchado que no hay forma alguna de ser atractivo con el nombre y el plan original, la mejor estrategia es hacer un rebranding. Esta parece ser la idea detrás de la nueva estrategia de Facebook para su criptomoneda. De acuerdo con Reuters, la red social y sus aliados han decidido cambiar el nombre de Libra. Ahora la divisa digital será conocida como Diem, como parte de un esfuerzo para ganar luz verde en su implementación.

Stuart Levey, CEO de la organización que estará detrás la moneda digital que primero propuso Facebook, señala que el rebranding es parte de una estrategia generalizada de simplificación. En una entrevista con Reuters, el líder de la otrora Libra Association (y ahora Diem Association) señaló que el viejo nombre se alineaba con una primera versión del proyecto. Uno que ya no está vigente, gracias a los cambios radicales a la propuesta que se hicieron desde entonces.

Levey confirmó que el proyecto Diem, como se conoce desde hace unos días, solo estrenará una única stablecoin ligada al dólar. También aseguró que el cambio del nombre no representa una estrategia para distanciarse de Facebook y la respuesta negativa que generó entre varios reguladores. Por el contrario, apuntó que la red social sigue siendo un miembro importante de la asociación. Dijo que más bien se trata de una declaración de autonomía e independencia.

¿Bastará un rebranding para la criptomoneda de Facebook?

Justamente esta cercanía con la red social de Mark Zuckerberg es uno de los elementos que más fricciones ha generado entre los reguladores y la ahora Diem Association. De acuerdo con CNBC, el tamaño internacional de Facebook podría impulsar a la criptomoneda a convertirse en un activo de alcance internacional. Y con un amplio uso, podría volverse una divisa privada que reduzca la importancia de los gobiernos sobre su propia política fiscal en el largo plazo.

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Enfocándose al rebranding de Libra a Diem, ¿podría ser una estrategia efectiva para Facebook y sus aliados? Tal vez. De acuerdo con PR Week, en efecto un cambio de nombre podría ser una solución efectiva para lidiar con una crisis. Pero tienen que existir las condiciones ideales para que funcione. Y la más importante, que la nueva marca refleje claramente que se está tomando un camino muy distinto para el proyecto en cuestión frente a lo que existía antes.

Así pues, es posible que Facebook sí tenga un éxito con el cambio a Diem. Cabe destacar que, como apunta Xataka, la criptomoneda tiene meses que se reestructuró para abordar las preocupaciones de muchos reguladores. Y en este sentido, se alejó del sistema que crearon agentes como Bitcoin y está más cercana a proyectos de carteras digitales al estilo PayPal. En este contexto, el cambio de nombre sirve para reafirmar el cambio de dirección a largo plazo.

El poder de un rebranding

Facebook no es la única que ha pensado en cambiar el nombre de un producto icónico, pero muy problemático, para hacerlo viable en el largo plazo. Desde junio del año pasado, en datos de Bloomberg, Boeing consideró hacer un rebranding a su aeronave 737 Max. El modelo se vio involucrado en un par de accidentes mortales, lo que provocó que saliera de circulación por meses. Para restaurar la confianza del público, se pensó cambiar el nombre del vehículo.

También hay razones más simples para hacer un rebranding. Como a Facebook, McDonald’s  dijo hace unas semanas que iba a cambiar algunos elementos gráficos de sus restaurantes y empaques. Sin embargo, contrario a la red social, no era para mejorar la imagen de la marca frente a ojos de los reguladores, ni marcar un nuevo camino en la dirección de la compañía. Se trata de una simple modernización para poder impulsar las ventas en el entorno post-COVID.