Esta semana no ha sido la mejor para Spotify. En los últimos dos días, la marca se ha visto envuelta en diversas polémicas por una sola razón: el contenido que quita y mantiene en su plataforma.
Lo que llama la atención es que aunque las críticas a la firma no han hecho otra cosas más que aumentar en cantidad, frecuencia y tono, la marca no ha emitido ninguna postura o acción al respecto.
Los antecedentes
Durante el medio día de este jueves, Spotify se convirtió en tendencia luego de que cientos de usuarios reclamaron la desaparición de Safaera, tema interpretado por Bad Bunny, Ñengo Flow y Jowell y Randy, que durante esta cuarentena ha ganado especial relevancia.
Para la plataforma de música en streaming, esta situación se ha convertido en una peculiar crisis de marca que la llevó a ocupar las primeras posiciones dentro de las tendencias en el mercado mexicano durante todo el día con un total de tweets acumulado de 615 mil tweets hasta las 4 de la tarde de ayer.
Hasta el momento del cierre de esta nota, Spotify no ha indicado las razones por las que el tema musical se ha eliminado de su servicio y ante no tener respuesta, el consumidor ha comenzado a llamar a un boicot en contra de dicha plataforma de entretenimiento.
Y es que este tema derivó en otro más para la marca. Ahora los usuarios se preguntan las razones por las que el tema de Bad Bunny fie eliminado y no se toman las mismas medidas con los temas de Johnny Escutia, supuesto youtuber que dentro del servicio tiene una serie de canciones cuyas letras incitan a la violencia contra la mujer además de hacer alusión a temas de violaciones, secuestro y pedofilia.
¿En dónde está Spotify?
Con más de 29,7 mil tweets relacionados, el término “Johnny Escutia” se ha mantenido como tendencia durante todo este viernes en el mercado mexicano dentro de Twitter.
La mayoría de estas publicaciones se asocian con la demanda de los usuarios por eliminar el contenido publicado por este rapero que es considerado como un acto de violencia hacia la mujer.
Qué horror @SpotifyMexico ¿Por qué no quitas la “música” de Johnny Escutia? Y ni siquiera da la opción de reportarla, literalmente tiene canciones sobre pedofilia, violencia, feminicidios y una bastante explícita dónde dice que quiere matar a @yuyacst pic.twitter.com/fL2iO2CRt9
— Khaleesi in quarantine (@LaKhaleesi_26) May 15, 2020
He quedado totalmente traumada, con ascos con este “artista”
¿Qué onda @SpotifyMexico?
Ese Johnny Escutia habla de puras violaciones ? pic.twitter.com/wLqZhI7DH4— Karla (･ᴗ･)♡ (@Karla_GarridoH) May 15, 2020
Pinche Spotify PENDEJO que quita safaera pero deja canciones de Johnny Escutia sobre cómo violar y ademas de querer matar YUYA. pic.twitter.com/kjFwCpbVCP
— Ixchel (@Unicorn_blod) May 15, 2020
Si bien los usuarios tienen la posibilidad de denunciar el contenido para que este sea evaluado y eventualmente retirado por la plataforma, en un principio, los usuarios demandaron a Spotify la eliminación expresa de sus canciones, de la misma manera que sucedo con Safaera.
La conversación ahora ya involucra a otros servicios de música online como Youtube y Amazon a los que se les demanda tomar la misma acción.
Los usuarios ya han creado una petición en el sitio Change.org en la que se lee:
“El contenido de Johnny Escutia es una aberración y una absoluta falta de respeto hacia la comunidad en general. No podemos tolerar este tipo de comportamiento ni discurso. Exijamos a TODAS las plataformas de “streaming de música” que bajen el contenido de este individuo peligrosamente misógino y psicópata en potencia”.
Al momento del cierre de esta nota 10 mil 326 personas han firmado la petición en espera de tener respuesta por parte de las marcas mencionadas.
¿Se olvidó del consumidor y su responsabilidad?
Aunque es cierto que ahora ya son muchas marcas involucradas en este asunto, no debemos olvidar que todo comenzó desde Spotify, firma que no ha fijado postura al respecto aun cuando las publicaciones en sus redes sociales se mantienen activas.
Parece que Spotify se olvidó de escuchar a su consumidor y, más importante, de la responsabilidad que como plataforma de difusión de contenido tiene.
La historia ha demostrado que aunque estas plataformas no son las creadoras directas de lo que sus sitios hospedan, si tienen una responsabilidad en gestionar, evaluar y, en los casos necesarios, eliminar aquellos contenidos que no son correctos. Basta con ver los problemas enfrentados por Youtube hace apenas algunos años.
Esta omisión no es cosa menor, lo que está en juego es la reputación de la marca que parece ignorar la fuente más grande de sus negocio: sus clientes y sus necesidades e intereses.
