Si usted conoce desde que tiene uso de razón una de las marcas más queridas del país (le estoy hablando nada más ni menos que de “Ramo”) la cual a estado presente en casi todos los hogares de Colombia y conoce que su producto estrella es sin duda alguna el Chocoramo. Usted ha podido percibir los importantes cambios en sus estrategias de promoción, cambios que van desde su comunicación, su tardía y casi inimaginable incursión en el marketing mix del cual no necesitaba mucho pues sus ventas diarias eran – y continúan siendo -revolucionarias y la completa gama de productos para las loncheras, onces y casi cualquier espacio donde se quisiera comer un panque, una galleta o una torta.

La agencia que acoge la marca y el concepto de campaña actual es Grey Colombia que bajo el concepto de “no mostrar el hambre” presenta casos en donde es mejor comerse un Chocoramo que dejarse llevar por la misma y cometer algún error o hacer el oso (literal).

Sin embargo, y pese a los ingeniosos desarrollos en materia creativa de Grey los consumidores de la marca tenemos un sin sabor que estamos pasando de forma resignada con el tiempo y es ¿hoy un chocoramo cuesta 1.300 pesos? Y no queremos hablar de temas financieros ni mucho menos…pero uno de los insights de la marca y que nos lograban cautivar día a día era que su sabor era igual de encantador que su precio.

Así pues Grey Colombia asumió uno de los retos más complicados de una agencia, continuar el legado del señor Molano quien falleció en 2014 y no dejar desbancar la marca del “top of heart” que logro desde hace ya más de 60 años

Otro factor que es trascendental en este camino creativo es la competencia, como es de esperarse Bimbo y Comapan dos de sus grandes competidores siguen generando activaciones y utilizando todo su apalancamiento comercial para generar nuevos nichos de consumidores.

En esta oportunidad los creativos de Grey generaron un comercial que explica perfectamente porque es necesario no mostrar el hambre.