México, D.F.-. De acuerdo con datos de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (CANAIVE), los sectores productivos que integran la moda mexicana cerraron el 2013 con una producción de 144 mil 186 millones de pesos -con un crecimiento del 0.1 por ciento-, procedentes de 95 mil 130 empresas que dan empleo a 792 mil 772 personas y registran exportaciones por más de 16 mil millones de pesos.
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Al tener como referente estos números, se prevé que para el cierre de este año la industria de la moda en el país alcanzará un superávit comercial cercano a los 8 mil millones de pesos con lo que se ubicará como la tercer industria más importante por su producción, dentro de la división manufacturera del país.
El crecimiento del sector es un fenómeno impulsado por la consolidación de jugadores nacionales así como la entrada de firmas transnacionales que encuentran en el país un mercado sano que crece y define tendencias propias que son reconocidas en otras regiones del mundo.
Como lo menciona Nataly Gutiérrez, brand manager para Diesel México, “estamos en una etapa donde la industria está floreciendo en todos los sentidos. Por un lado los diseñadores nacionales tienen cada vez más plataformas para exponer y vender su trabajo, resultando en un mayor alcance en cuanto a número de clientes en comparación con lo que sucedía algunos años, cuando el desconocimiento de dichas marcas era la principal barrera para crecer. Por otro lado, empresas extranjeras fuertes están volteando a ver a México como un país consumidor de moda, a todos los niveles: desde lujo hasta fast-fashion; por lo anterior, han llegado a establecer subsidiarias a nuestro país, lo cual implica una inversión directa, así como generación de más empleos dentro de la industria”.
La brecha se reduce
Estas tendencias se benefician de la inmediatez que implican los medios digitales que permiten al consumidor de moda mantenerse al tanto de las últimas tendencias en otros mercados y exigir a las marcas la misma oferta de manera local.
Lo anterior da como resultado una industria que cada vez se empareja más a las grandes potencias internacionales de la moda que si bien enfrenta algunas deficiencias, tiene oportunidades para optimizar su desarrollo.
“Actualmente, con la incorporación de nuevas marcas en el mercado, la brecha con otros países se van cerrando. Tenemos que considerar un tema de globalidad que le ha dado un carácter de urgencia a mostrar colecciones vigentes y en tiempo real en todas partes del mundo. El consumidor ya no puede esperar una o dos temporadas para obtener los productos que está viendo en los medios. Las deficiencias son cada vez menos, sin dejar de mencionar el factor precio y demanda en artículos específicamente de moda que tienen un mejor desarrollo en otros países”, afirmó Pedro Colorado, brand marketing manager para Dockers México y Latam.
*Más detalles sobre el artículo en la edición impresa de noviembre 2014
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