Si eres reclutador o candidato, vendedor o prospecto, estás obligado a saber cómo potenciar con éxito el uso de LinkedIn. Tengas o no búsquedas que cumplir, empleo que buscar, producto o servicio por vender, promover o comprar, al desempeñar estos roles estamos obligados a permanecer activa y de manera participativa, en el “gran aparador” que hoy día es LinkedIn.

Hoy día en el sistema de búsqueda de empleo, reclutamiento y/o de compra, promocion y venta, no se tiene claridad de quién busca a quién, es decir si el candidato busca al reclutador, el vendedor al comprador o viceversa; en nuestra experiencia, es un camino de doble sentido, hoy día todos somos cazadores y con posibilidad de ser cazados, apoyados con este gran mundo de la tecnología informática, de internet, de las redes sociales, y con mayor precisión de las redes profesionales, en particular LinkedIn; en realidad nos buscamos unos a otros.

Por lo anterior si eres un reclutador de personal o de clientes en general, o eres un cliente o candidato en lo particular, deberás considerar estas ideas o reglas básicas con el propósito de tener un perfil activo en Linkedin, en beneficio de tus metas personales y/o profesionales.

Y los objetivos son diversos, como diversas somos las personas; podrás buscar o no empleo, tendrás el propósito de fortalecer tu “Personal Branding” tu marca personal, podrás estar con la intención de compartir tus experiencias y conocimientos, tus acciones podrían ser parte de un “Employer Brandig” o participar en debates en diversos grupos, o como parte del fortalecimiento del “Branding” de tu empresa, ampliar tus relaciones realizando networking, o fortalecer tu cartera de contactos, etc.
Pues bien, sea el objetivo que tengas, tendrás que considerar algunos principios ya probados por miles de exitosos navegantes de las redes sociales profesionales. El uso de las redes profesionales es un tema de profesionales que requieren resultados profesionales, eficientes, eficaces, de calidad, en una palabra: resultados productivos.

Solo unas cuantas sencillas reglas
1. Considerar que Linkedin es una plataforma de personas; en cualquier estrategia de conexión en internet, en las redes sociales o profesionales y en específico en LinkedIn la persona deberá ser el centro de tus acciones; no puedes olvidar que tú eres persona y que nos gusta que nos traten como tales. Ya pasaron los tiempos en que el reclutador o un vendedor, tenía como se dice popularmente, “el sartén por el mango, y el mango también” hoy día ni tienen el sartén y menos el mango. Seguramente en cada invitación que envías o te envían estás esperando una respuesta con un trato, si no cálido, si un diálogo amable, afable o cuando menos respetuoso, de tu persona, tiempo y esfuerzo. Y por supuesto los integrantes de una red como LinkedIn o similar no aceptan, ni aceptarán que tratemos de vender productos y servicios como si fuera un “mercado sobre ruedas”.

Hablando de personas, todas somos únicos e irrepetibles, no obstante esta reflexión, existen rangos de edad que nos permiten identificar las actitudes, creencias, comportamientos, motivaciones de cada generación. En la red navegan personas, por lo menos de 3 hasta 4 generaciones, como lo son, los, “ baby boomers”, y las generaciones identificadas como “X”, “Y”, y “Millenium”, que son las clasificaciones por rangos de edad, pero a todo esto, si no conoces sus motivaciones, su código de comunicación, si no los conoces, entonces: ¿cómo las vas a contactar, como te vas a comunicar?

2. Tener objetivos: hay que considerar que no podemos ir navegando “sin ton ni son, Debemos tener un público objetivo en nuestra estrategia de redes sociales, lo que nos lleva a ser cuidadosos de a quién invitamos, a quién le decimos “SI” y a quien rechazamos. No podemos andar por las redes sociales, queriendo ser amigos o contactos de todo el mundo. esto es muy sencillo de ejemplificar: no vas por la calle invitando o esperando que te invite (n) la (s) persona (s) que se crucen en tu camino. Eso tiene un riesgo, una falta de eficiencia y eficacia, por lo tanto una baja productividad en redes profesionales. Ya seas candidato, un prospecto de cliente, un vendedor o un reclutador o “head hunter”; hay que tener definido un Público Objetivo y éste corresponderá a tu misión, visión, “Bussines Plan” a lo que desees alcanzar desde una visión como profesional y/o de tu organismo, empresa, negocio.

3. La Estrategia es el polvo de la varita mágica: Todos sabemos que estrategia es el arte de proyectar y dirigir las operaciones, tener el camino de nuestras acciones muy meditadas, encaminadas hacia un fin determinado. Navegar en internet, incursionar en LinkedIn, tendrá una diferencia enorme cuando has definido tu público objetivo, tu razón de estar y usar LinkedIn, cuando emerge de tu misión, visión, objetivos, metas, ya que te facilitará la estrategia a seguir,para saber cuando navegar, que comunicar y consecuentemente no “naufragar”

4. La Tecnología seleccionada: Hoy damos gracias a esos genios de la tecnología informática, Internet, redes sociales, que nos han puesto un camino, una medio de comunicación que se suma a los medios analógicos y los físicos, presenciales, para poder comunicarnos, sin fronteras y sin barreras de idioma. Pero no nos perdamos, la tecnología informática es un medio más, no es para todos, ni para todo, es muy importante pero no deberá absorber nuestras acciones sin ton, ni son; la tecnología que usemos con apoyo de las redes sociales, será producto de haber identificado nuestro público meta, nuestros objetivos y haber diseñado una estrategia, alineada a nuestra misión, visión, objetivos, como empresas y/o como personas. Sin olvidar que el contacto son y serán personas físicas reales. Podremos usar Facebook, Twitter, Viadeo, Xing o LinkedIn y todas ellas deberán ser producto de una decisión fundamentada.

La liga entre el espacio físico y virtual somos las personas, mismas que con nuestra navegación en la red vamos dejando una huella digital, formando una identidad, digital, creando nuestra reputación digital; por más simple y cuidadoso que sea tu navegar por la Web, quedará una huella digital, casi imposible de borrar.

5. Administrar tu navegación por la red: Así como seremos cuidadosos con nuestro público meta, nuestros objetivos, la estrategia, la tecnología a utilizar, deberemos poner cuidado en nuestra actuación o la de las personas, colaboradores, empleados, que nos apoyen en la navegación y ejecución de nuestra estrategia en las redes sociales profesionales. Las personas estarán alineadas con los valores que nos identifican, y deberán tener la cultura, competencias y capacitación adecuada para que esa varita mágica llamada, en este caso LinkedIn surta efecto y alcancemos nuestros objetivos profesionales.

Este podría ser un camino a seguir, lo importante será entender que lo que no puedas hacer en la vida real como algunos la identifican, no lo podrás hacer en la red, estamos convencidos que el espacio entre lo físico y virtual es la persona, por lo que internet, las redes sociales y en específico LinkedIn es una extensión de lo real, no podremos subsistir ni existir en la red con una doble personalidad, eres único e irrepetible, vamos aprovechando este milagro de la tecnología, esta “vara mágica” identificada como LinkedIn importante y útil red profesional para profesionales..