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Autoridades sanitarias y Gobernación se aliaron en un plan de seguridad contra los cigarros electrónicos.
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Estrategia contempla desde la vigilancia, hasta el aseguramiento de los dispositivos, considerados dañinos.
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Inhalación de sustancias por medio del vapeo es la nueva preocupación por enfermedades respiratorias.
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) informó que, debido a los riesgos sanitarios que representan los cigarros electrónicos, se llevarían a cabo nuevas medidas de protección en México que inhiban su compra y uso en todo territorio nacional.
De acuerdo con la colaboración entre la Cofepris y la Secretaría de Gobernación (Segob), todas las modalidades de vapeadores son foco de atención de riesgo, por lo que “fue necesario” activar la alerta máxima sanitaria para “prevenir riesgos y fortalecer acciones de control sanitario a estos productos, los cuales son prioritarios para la autoridad sanitaria federal”.
A partir de ahora, autoridades informaron de tres medidas principales para el aseguramiento de los dispositivos electrónicos y la difusión de sus daños a la salud para inhibir su consumo ilegal.
Por ejemplo, la Cofepris incrementará el número de visitas de verificación y aseguramiento en aquellos puntos con mayor riesgo de consumo de vapeadores, sobre todo para evitar que sean compartidos a menores de edad; también se reforzará la capacidad del Sector Salud y todos los organismos apéndices de las entidades federativas para capacitar al personal y llevar un mejor control sanitario sobre los establecimientos que venden los productos; y por último, se llevará a cabo una Jornada Nacional de Denuncia Sanitaria rutinaria enfocada en promover la vigilancia y reportar los puntos de venta que comercialicen cigarros electrónicos.
Cofepris vs. cigarros electrónicos
La Cofepris afirmó que las medidas contra todo tipo de vapeadores en México, uso, promoción y venta, derivan de las altas afectaciones que estos productos generar en la gente, pues, según la dependencia, la inhalación frecuentemente encontrado en dispositivos de vapeo denominado acetato de vitamina E constituye un riesgo alto al tratarse de sustancias tóxicas que pueden provocar enfermedades respiratorias agudas, cáncer e, incluso, la muerte.
“Ningún vapeador o calentador de tabaco cuenta con autorización sanitaria, ni reconocimiento por parte de la Secretaría de Salud como productos de riesgo reducido o alternativo. Como se informó en la primera Semana Nacional contra Riesgos Sanitarios, autoridades federales y estatales ya realizan operativos para asegurar este tipo de productos gracias a la vigilancia y denuncia ciudadana”, expuso la dependencia en un comunicado.
Y es que, la presencia del acetato de vitamina E a la que Cofepris hace alusión sí ha sido demostrada como dañina, pues sólo en un estudio realizado por el Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) se comprobó que más de 35 muestras de personas fallecidas la consumían mediante dispositivos de vapeo, como los cigarros electrónicos.
“Los cigarros electrónicos (E-cig o vaporizadores) y los productos de tabaco calentado son promovidos como una alternativa para dejar de fumar; sin embargo, su eficacia no ha sido comprobada. En cambio, sus derivados de compuestos carcinógenos, sustancias tóxicas y emisiones en forma de aerosol representan un grave riesgo para quienes los consumen“, dice en su nota de prensa.
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