Tesla obtuvo ganancias en el tercer trimestre de 2018, revirtiendo una tendencia negativa de casi dos años y cumpliendo con la promesa de Elon Musk, su CEO y fundador, de dar un vuelco positivo a sus resultados.
Esto ocurre luego de meses de escándalos en los que estuvo involucrado Musk, como el haber amenazado con dejar de cotizar en Bolsa, algo que le valió, además de una caída en las acciones, un apercibimiento de las autoridades del gobierno estadounidense.
Las entregas del gigante de autos eléctricos de su sedán Modelo 3 llegaron a 56.000, superando los retrasos en la producción y los problemas de entrega.
Entre julio y septiembre, Tesla obtuvo una ganancia récord de US$ 312 millones, y se ubicó fuera del “rojo” por primera vez desde fines de 2016. Obtuvo US$ 6.800 millones en ingresos, por encima de las estimaciones de los analistas.
El dato duplica el registro de ingresos del mismo trimestre del año anterior.
Si se analiza la ganancia por auto entregado, también es el primer trimestre con fuerte ganancia de su historia, con poco más de US$ 5.000 por cada unidad, antes de impuestos. En el tercer trimestre de 2016 habia logrado un margen positivo, pero con muy poca cantidad de vehículos entregados.
En paralelo, las acciones de Tesla subieron un 12 por ciento en al cierre de las operaciones del miércoles.
La compañía automotriz que tiene una valuación de US$ 50.000 millones, el mayor rival de Detroit y que tiene sede en Silicon Valley, volvió a ganar el entusiasmo de los compradores de sus SUV y sedanes a batería, pero deberá seguir luchando para demostrar que puede sobrevivir en una industria altamente competitiva repleta de automóviles a gasolina más baratos.
En una carta dedicada a los inversores, Musk aprovechó para agradecer la confianza y, a la vez, para disparar hacia aquellos que lo criticaron. Fiel a su alto perfil, resaltó que “las ventas del Modelo 3 fueron fundamentales para hacer el negocio” y que es “sostenible” a pesar de que “muchos argumentaron sería imposible”.
Musk calificó a los resultados del periodo como “un verdadero trimestre histórico”.
Acelerar en China
Además, Tesla dijo en la presentación de las ganancias que acelerará su desembarco en China, donde dio a conocer que abrirá una fábrica en Shanghai para, posiblemente, ensamblar el Modelo 3 para compradores chinos en 2019.
A pesar de todo, hay que recordar que Musk sigue siendo mirado con atención por los mercados.
El excéntrico multimillonario fumó marihuana durante una entrevista en vivo y criticó a inversores, periodistas y reguladores federales y eso, y demoras en las entregas, derivaron en que la compañía que dirige haya perdido aproximadamente un cuarto de su valor desde el máximo en agosto pasado.
