Un grupo de importantes accionistas de Tesla insta al director ejecutivo Elon Musk a que reanude su compromiso en 40 horas semanales con la compañía de vehículos eléctricos, alegando la disminución de las ventas, el daño a su reputación y la creciente lista de proyectos externos del director ejecutivo, incluyendo su periodo en la administración Donald Trump, ya concluido.
En una carta enviada el miércoles a la presidenta del consejo de administración de Tesla, Robyn Denholm, los inversores instaron al consejo a exigir a Musk que dedique un mínimo de 40 horas semanales a la empresa y a adoptar nuevas políticas de gobernanza que limiten los compromisos externos de los directores.
También solicitaron un plan formal de sucesión del director ejecutivo y al menos un nuevo miembro independiente del consejo sin vínculos personales con Musk ni sus aliados.
La volatilidad del precio de las acciones de Tesla, la disminución de las ventas, así como los informes alarmantes sobre las prácticas de la compañía en materia de derechos humanos y el desplome de su reputación mundial, son motivo de grave preocupación, afirma la carta. El contenido de la carta fue publicado por la CNBC.
Además, muchos problemas están relacionados con las acciones del Sr. Musk fuera de su rol como Technoking y director ejecutivo de Tesla, incluyendo su destacado papel como arquitecto del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Estados Unidos. (DOGE).
El periodo de Musk en DOGE, una agencia federal que ayudó a dirigir durante el segundo mandato de la administración Trump, finalizó oficialmente esta semana, al expirar su límite de 130 días como empleado gubernamental especial.
“La misión de @DOGE se fortalecerá con el tiempo a medida que se convierta en una forma de vida en todo el gobierno”, escribió Musk en redes sociales el miércoles, y añadió en una publicación aparte: “Gracias, presidente Trump, por la oportunidad de reducir el gasto innecesario”.
Pero para algunos inversores de Tesla, su trabajo en el gobierno es un símbolo de un problema más profundo: un director ejecutivo cada vez más distraído de la misión principal de la compañía en un momento en que esta se enfrenta a crecientes dificultades.
Las ventas de Tesla se han desplomado, con las entregas europeas en abril bajando casi un 50 por ciento con respecto al mismo mes del año pasado. Las ventas globales de vehículos eléctricos en el primer trimestre también disminuyeron interanualmente, y las acciones de la compañía han caído un 12 por ciento en 2024, con un rendimiento muy inferior al del Nasdaq, que ha bajado aproximadamente un 1% durante el mismo período.
La imagen pública de la compañía también se ha visto afectada. Anteriormente clasificada entre las 10 marcas más admiradas de Estados Unidos, Tesla ha caído al puesto 95 en la última clasificación de la encuesta de Axios Harris, por detrás de otros seis fabricantes de automóviles.
Los inversores atribuyen la caída en parte a la actividad política de Musk, incluyendo una donación de casi 300 millones de dólares a iniciativas a favor de Trump y un controvertido respaldo al partido ultraderechista alemán AfD.
La carta fue firmada por accionistas que controlan un total de 7,9 millones de acciones de Tesla, incluyendo SOC Investment Group, la Federación Americana de Maestros, la tesorera del estado de Oregón, Elizabeth Steiner, y el contralor de la ciudad de Nueva York, Brad Lander.
Criticaron a la junta directiva de Tesla por “no estar dispuesta a actuar en el mejor interés de todos los accionistas de Tesla” y argumentaron que la “dedicación constante” de Musk es esencial para la recuperación de la compañía.
“Tesla se enfrenta a una crisis”, dice la carta sin rodeos.
El momento de la carta coincide con las tensiones actuales entre Musk y la junta directiva de Tesla sobre la remuneración de los ejecutivos.
En enero, un juez de Delaware anuló el paquete salarial de Musk de 2018, valorado en 56 000 millones de dólares, al dictaminar que la junta directiva engañó a los inversores y que Musk controlaba efectivamente la empresa.
Desde entonces, Musk ha exigido un nuevo acuerdo que le otorgue el 25 % de control de voto.
Este mes, Tesla anunció que Jack Hartung, exdirector financiero de Chipotle, se incorporará a su junta directiva.
Sin embargo, los inversores señalaron que Hartung trabajó anteriormente con el hermano de Musk, Kimbal Musk, director de Tesla, lo que generó inquietudes sobre la independencia de la junta directiva.
Musk, por su parte, declaró esta semana que planea “centrarse más” en sus negocios, que también incluyen el fabricante de cohetes SpaceX y la startup de inteligencia artificial xAI.
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