La lucha contra el terrorismo, que en los últimos meses se ha manifestado con énfasis en Europa, pero que es un flagelo mundial, tiene aliados en las redes sociales, como muestra la clausura de cientos de miles de cuentas, por parte de la red de ‘microblogging’ anunciado este jueves.
La suspensión de las 235.000 cuentas busca dificultar las comunicaciones y formas de captación y propaganda a estos movimientos, una decisión que se ha tomado con base en la promoción observada en estos perfiles, realizada durante los pasados seis meses.
En un comunicado, Twitter ha explicado que: “El mundo es testigo de una nueva oleada de ataques terroristas mortíferos y abominables. Condenamos enérgicamente estos actos y seguimos comprometidos en eliminar la promoción de la violencia y el terrorismo en nuestra plataforma”.
La compañía estadounidense también señala que ha incrementado sus equipos de búsqueda de cuentas relacionadas con el terrorismo y la violencia, para poder actuar con mayor rapidez ante este flagelo mundial. “En el futuro vamos a seguir invirtiendo tanto en tecnología como en otros recursos para afrontar este problema y actualizaremos los progresos que logramos habitualmente” señala Twitter en su mensaje.
Esta acción es parte de la respuesta de la red ante las acusaciones vertidas contra la misma hace un año, por el uso que determinados internautas le dan, como medio para hacer apología del terrorismo y la violencia. Hasta la fecha, son 360.000 las cuentas suspendidas, mientras la empresa explica que no cuentan con un “algoritmo mágico” para identificar este tipo de contenidos, y que por ello utilizan expertos analistas luchar contra los extremistas.