Bucarest

Porque aunque parezca mentira, la confusión que surge de la similitud de los nombres de las capitales rumana y húngara, respectivamente, ha llegado a casos como el de 400 fanáticos del fútbol que viajaron a Budapest, en vez de a Budapest y se quedaron sin ver el partido del Atletic Club de Bilbao en la final de la Europa League 2012.