arturo mora

Puede ser que el reciente triunfo de Trump tenga varias consecuencias significativas en el marketing internacional, basadas en las políticas y actitudes que Trump ha promovido desde su primer mandato y en su enfoque de “América Primero”.

A medida que los consumidores demanden un cambio real, la mercadotecnia tiene la capacidad de responder, promoviendo un futuro donde la sostenibilidad y el éxito
empresarial vayan de la mano. A menos que a las marcas les importe más el negocio
que la permanencia en este planeta.

La nostalgia puede ser un aliado poderoso en la mercadotecnia, pero no debe ser el único recurso. Solo las marcas que logren encontrar un equilibrio entre su historia y las necesidades del presente podrán asegurar su lugar en el futuro

Ligar en el supermercado usando piñas volteadas en el carrito de la compra es un fenómeno que da una perspectiva muy interesante sobre cómo las dinámicas sociales pueden ser aprovechadas por las marcas.

Debe quedar claro para todas las marcas que no pueden estar ajenas a todo lo que sucede en el entorno local e internacional y cuidar a detalle su comunicación.

El suceso que influye en la percepción pública, el juego político y las próximas elecciones en Estados Unidos, además de su repercusión internacional, pasa de ser un atentado a convertirse en una herramienta en tendencia, oscura y sucia, del marketing político llevado al extremo para ganar, sea como sea.

Cuando las marcas se acercan a sus usuarios de una manera natural, identificándose con sus hábitos diarios y no viéndolos solo como perfiles de “Targets” prediseñados, surgen tendencias interesantes como el “Get Ready With Me” y la “Womansfera”.