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En proyecciones de ALTO se han definido tareas cada vez más valiosas en consumo, como replantear las operaciones en punto de venta.
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La capacidad del retail a través de sus puntos de venta físicos permite comprender el reto que hay en replantear el comercio dentro de este segmento.
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Dentro de retail se han definido mejores ejercicios, como los que tienen que ver con la manera como las marcas están pensando en consumo.
Una proyección de ALTO dio cuenta de la percepción que hay respecto al robo hormiga en retail, dando cuenta de lo valioso que se ha vuelto replantear las operaciones al interior de un punto de venta.
Con base en cifras de Semáforo Delictivo, el organismo reportó que en 2021 se registraron más de 86 mil 700 robos en establecimientos víctimas de robo.
“En México más de 86 mil 700 negocios fueron asaltados o allanados en 2021. El número de establecimientos allanados en México aumentó continuamente entre 2015 y 2019, en el primero se reportaron menos de 66 mil de estos hechos”, comentó Teresa Romero, analista de Statista en exclusiva para suscriptores de la plataforma sobre un estudio que nos habla del estado de seguridad en que se encuentra el retail en México.
Cambios en retail y la influencia de las tiendas
Hay cambios en retail que nos dan cuenta de los retos en las tiendas en la actualidad y permiten ver los alcances que las marcas pueden alcanzar ante mercados dinámicos.
“El análisis de ALTO también detectó que hay grupos de farderos que han ampliado su zona de operación, conformando una red que actúa en Ciudad de México, Estado de México, Puebla, Nuevo León, Guanajuato y Tabasco en donde efectúan robos, fraudes e incluso saqueo. La empresa detectó que muchas de estas bandas venden los artículos sustraídos en el mercado informal como tianguis y plataformas como Marketplace”, cita el estudio.
Los insights patentados en esta investigación revelan que el robo en retail se detonó en 40 por ciento durante 2022, mientras que una mayoría de 59 por ciento de estos incidentes se registraron en Ciudad de México, Estado de México, Jalisco y Puebla.
Con base en este estudio, hay un incremento de 39 por ciento en la percepción de delitos, también los robos con violencia, como hemos reportado, se incrementaron en 40 or ciento. Los hurtos internos, delitos violentos y saqueos se detonaron en 33 por ciento.
Las sensibles cifras que ALTO compartió nos recuerdan lo importante que se ha vuelto el consumo en la actualidad, considerando que es una actividad que detona hábitos de consumo y malas prácticas.
Como estos números, plataformas como Midot han medido el impacto que los actos deshonestos tienen en las empresas y en su productividad.
“Esta pérdida se asocia a diferentes hechos. Lo más inmediato es la contratación de una persona deshonesta, que pone en riesgo a la economía y los modelos de negocio de la organización. El estimado real de las personas que mienten en su CV es de 48 por ciento, ante esta cifra es altamente recomendable la ejecución de evaluaciones que permitan predecir comportamientos poco éticos de parte del colaborador”, ha reconocido
Las prácticas delictivas se han vuelto en el mercado, en situaciones que nos dan cuenta del reto que enfrentan las marcas para poder trascender ante el consumidor más allá de la simple necesidad de venta, ahora ante fenómenos como el robo de productos.
Esto patenta la necesidad de la promoción de una cultura de consumo que ayude a aminorar el impacto que prácticas como el robo o actos deshonestos tienen en punto de venta.
