• Las nuevas modificaciones a la Ley General para el Control del Tabaco expanden las zonas libres de humo en el país.

• La Secretaría de Salud considera que la medida evitará cerca de 49 mil muertes prematuras en los próximos 10 años.

• Miembros del sector restaurantero, misceláneo y abarrotes ya alistad diversos amparos individuales y colectivos para detener la regulación del tabaco.

Pequeños comercios misceláneos, minoristas, abarroteros, restauranteros y, sobre todo, miembros de la industria tabacalera alistan una serie de amparos contra la Ley General para el Control del Tabaco que entró en vigor este 15 de enero de 2023 y que restringe tanto a comerciantes como a consumidores mexicanos.

Esta normativa es parte de un decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) que estipula prohibiciones publicitarias y de consumo, desde el muestreo de productos con tabaco en puntos de venta o comercio físicos, hasta la eliminación de zonas para fumar en espacios públicos, restaurantes, bares, horeles, salones de fiestas, centros comerciales y cualquier otro tipo de comercio.

¿Qué dice la Ley de Tabaco?

Para entender las repercusiones que esta Ley puede tener a la industria mexicana, es importante conocer el trasfondo de la medida. En términos publicitarios, el texto dice explícitamente que: “toda forma de publicidad, promoción y patrocinio de los productos elaborados con tabaco, en forma directa o indirecta, a través de cualquier medio de comunicación y difusión será sancionada”.

Esto quiere decir que no se deberán ver cigarrillos en medios impresos o digitales, en volantes, vallas publicitarias, carteles o letreros, así como en anuncios vía radio, cine, televisión, teatro, espectáculos en vivo, películas cinematográficas o comunicación vía satélite.

Asimismo, quedará prohibido todo tipo de comunicación que promueva o incite el uso de productos de tabaco, marcas o fabricantes, ya sea por correspondencia, servicio postal o correo electrónico.

“Para la comercialización de los productos de tabaco deberá realizarse a través de una lista textual y escrita de estos productos con sus precios, sin logotipos, sellos o marcas. Dicha lista de comercialización deberá cumplir con los requisitos y características que establezca la Secretaría mediante disposiciones generales que al efecto emita y deberá publicarse en el Diario Oficial de la Federación”, dice la medida publicada este 16 de diciembre en el DOF.

La normatividad también limitará a la población consumidora del tabaco, quien no podrá encender un cigarrillo en centros de trabajo, transporte público, escuelas, sedes de espectáculos, hoteles, estadios, plazas comerciales, playas, parques o lugares públicos con acceso a adolescentes.

El tema no debe tomarse a la ligera, pues una de las razones por las que ha causado tanto revuelo tanto en ciudadanos como en la iniciativa privada es la penalización del reglamento.

Y es que para establecimientos y marcas sólo se sabe que las multas pueden ir desde los 60 mil hasta el medio millón de pesos por incumplimiento, además de una inminente clausura por permitir a los clientes fumar en sus instalaciones y la cancelación de su licencia sanitaria.

Mientras tanto, a la población que no respete los espacios libres de humo, se le impondrán cuotas de hasta 3 mil pesos o arrestado por 36 horas.

Se espera gran ola de amparos contra la Ley de Tabaco

Empresarios y emprendedores de toda la República mexicana ya alistan medidas legales para combatir el reglamento que les imposibilita la venta de cigarros o espacios para fumar.

De acuerdo con la Alianza Nacional de Pequeños Comercios (Anpec) este camino de defensa es largo, algo que muchos pequeños empresarios no pueden costear, pues estiman que promover un amparo podría costar entre 40 y 50 mil pesos con asesoría y acción de un despacho legal especializado.

Por ello, ante la insuficiencia económica y logística que tienen los pequeños comercios para tramitar juicios de esta magnitud, la Anpec busca poner en marcha un ejercicio de convocatoria para la alianza y asesoría de un amparo colectivo.

Así, esta semana la organización empezó motivando a comerciantes a sumarse a la acción mediante una campaña que busca derogar el decreto y evitar afectaciones económicas, pues se esperan pérdidas de hasta el 25 por ciento en las ventas que, a su vez, impactarían en 1.2 millones de establecimientos y en los empleos que generan.

Asimismo, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), representante de la Iniciativa Privada, también evalúa la posibilidad de emitir un amparo una vez que el sector restaurantero delimite los lineamientos y afectaciones por espacios restringidos.

Y es que en febrero de 2022, una reforma a la Ley General de Control de Tabaco permitía que los lugares públicos contaran con zonas exclusivas para no fuimadores y, ahora, un año después, estas modificaciones e infraestructuras en lugares como el sector restaurantero no podrán utilizarse.

Hasta el momento, los anuncios que plantean acciones legales y una “abalancha” de amparos se contemplan en Ciudad de México, Yucatán, Quintana Roo, Morelos, Veracruz, Tabasco, Durango, Sonora, Oaxaca y Guanajuato, sin descartar que pronto se den a conocer las acciones de las grandes marcas tabacaleras.

Esto, ya que la industria en México no es pequeña; las compañías que integran el el Consejo Nacional de la Industria Tabacalera (Conainta) representan el 25 por ciento de las ventas mensuales de tienditas.

De acuerdo con el último ranking del departamento de investigación de Statista, en 2021 Marlboro lideró en el mercado de cigarros a nivel mundial con la cantidad de 35 millones de dólares, seguido por Pall Mall y L&M, con 7 y 6.8 millones de dólares respectivamente.

No obstante, pese a la esperada “ola de amparos”, el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) afirmó esta mañana que entiende a los comerciantes, pero no darán marcha atrás.

“Sí está demostrado que el tabaco afecta a la salud, las medidas que se aprueben ayudan a un buen propósito, desde luego quienes tienen el negocio del tabaco, la venta de los vapeadores, pueden no estar de acuerdo, incluso medios de información, que en este caso serían medios de publicidad, publicistas porque les deja mucho dinero, pero a costo de la vida de mucha gente; entonces, son decisiones que se tienen que tomar”, dijo.

Espacios 100% libres de humo… en el mundo

Aunque, hoy por hoy, la ley antitabaco es controversial, no se trata de una medida exclusiva de México, pues en todo el globo se suman poco a poco legislaciones más restrictivas para los fumadores, todas con un factor común: limitar los espacios de consumo de tabaco.

Como ejemplo, encontramos a España, que desde 2011 ha reformado diversas leyes para prohibir fumar en el interior de bares, restaurantes y todo tipo de establecimientos hosteleros, así como en playas y terrazas.

Japón también es uno de los países más tajantes en el consumo de tabaco, y esto pese a estar junto a China, lugar con casi un tercio de los consumidores de tabaco del planeta. En el país nipón, además de las normativas, la cultura dicta que comer o fumar en las calles mientras se transita es considerado de mal gusto.

En cuanto a la Ley, se contemplan zonas libres de humo y se multa con hasta 2 mil yenes a los fumadores de todo el país, dejando a los ciudadanos la opción de continuar con su hábito en el interior de sus casas o locales con permiso.

En Nueva Zelanda se prohibe la venta de tabaco desde 2006 e, incluso, se cuenta con un impuesto del 100 por ciento sobre cigarros importados para consumo privado, con multas desde los 225 dólares, es decir, 14 veces el salario promedio mensual de este lugar, que es de 16 dólares.

En Australia se multa por tirar colillas en el suelo y también se prohibe fumar en espacios públicos; en Bélgica se limitan espacios comerciales, al igual que en México; y en Estados Unidos, desde 1964, existen leyes severas por estado que “ahorcan” a fumadores aún en sus propiedades privadas, por ejemplo, en California, se prohibe a los vecinos fumar tabaco en casa si viven en edificios de tres o más departamentos colindantes, otros estados solo limitan a espacios públicos libres de humo o venden los cigarros a precios muy elevados para combatir el tabaquismo.

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