A unos días de celebrarse el Día del Niño y la Niña en México, el derecho a la educación no está garantizado para la niñez y adolescencia en el estado de Guerrero.

Se estima que 296 mil niñas, niños y adolescentes fueron afectados y se han enfrentado a necesidades críticas en áreas fundamentales como supervivencia, protección y seguridad, acceso a alimentos y agua, alojamiento, atención médica y, sobre todo, educación. 

Las primeras semanas y meses la ayuda no faltó; desde autoridades locales, estatales y federales, hasta la sociedad civil y organizaciones sin fines de lucro activaron protocolos para apoyar a más de un millón de personas damnificadas por el huracán categoría 5. 

Sin embargo, cinco meses después, y aunque la Secretaría de Educación Pública reportó en febrero pasado que la mayor parte de los planteles educativos de Acapulco y Coyuca de Benítez ya operan con normalidad, desde Save the Children hemos documentado que algunas escuelas aún no cuentan con jornadas completas, debido a las labores de reconstrucción y, en otros casos, a que ni siquiera se ha comenzado con dicho proceso.

Ante este escenario, hemos canalizado esfuerzos hacia diversas iniciativas, que incluyen capacitaciones a 573 docentes en las cuales se prioriza su bienestar y salud mental, además de compartirles herramientas para el apoyo psicosocial a niñas, niños y adolescentes para un regreso seguro a clases. 

Atender la educación en el estado de Guerrero es y debe ser un tema prioritario, ya que, lamentablemente, presenta importantes índices de analfabetismo y la preocupante tendencia a incorporar niñas y niños que interrumpen su trayectoria educativa a trabajos de cuidado y a labores arriesgadas e inadecuadas a su edad. 

Frente al inquietante panorama, nuestra experiencia en crisis humanitarias nos guio para implementar Aulas Temporales de Aprendizaje, estas son espacios que, ante una catástrofe, permiten que las niñas y niños no interrumpan su educación, se prevenga que pierdan aprendizajes y se evite que abandonen permanentemente sus estudios.

No obstante, el derecho a la educación en Guerrero sigue estando gravemente limitado. Aún es necesario que autoridades estatales y federales refuercen su compromiso para que todas las niñas, niños y adolescentes del estado asistan a la escuela, con jornadas escolares sin reducciones y, principalmente, que se cuenten con las condiciones y espacios adecuados para lograr un pleno aprendizaje. 

Asimismo, es importantísimo que se lleven a cabo las tareas de refuerzo socioemocional para toda la comunidad educativa, tanto docentes, madres, padres y cuidadores, como niñas, niños y adolescentes.

Como parte de la primera fase de la intervención de Save the Children por la emergencia humanitaria causada por el huracán Otis, hemos brindado apoyo a través de 5,050 paquetes de alimentos, 2,190 kits de higiene y tinacos para 112 familias, 2 escuelas y 1 centro de salud; alcanzando en esta fase a casi 16 mil personas afectadas. La segunda fase está en marcha y será ejecutada hasta el 31 de julio. Hasta el momento, hemos instalado 11 Aulas Temporales de Aprendizaje; 7 en Acapulco y 4 en Coyuca de Benítez, impactando a casi 400 estudiantes. 

En el mes en el que se celebra el Día del Niño y de la Niña hacemos un llamado a la sociedad para que se una a nuestro movimiento y nos ayude a lograr la necesaria instalación de 13 aulas más en los próximos meses. 

Otis se destruyó sus escuelas, no sus ganas de estudiar. Unamos fuerza para que todas y todos vuelvan a clases. Apoya aquí.