La elección judicial celebrada el 1 de junio de 2025 en México marcó un hito en la historia del país, al permitir por primera vez que la ciudadanía eligiera directamente a jueces, magistrados y ministros. Sin embargo, este proceso también puso de manifiesto desafíos significativos en la comunicación y participación ciudadana, donde los medios de comunicación jugaron un papel crucial.
La reforma judicial impulsada por el gobierno de Morena buscaba, a decir de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, democratizar la justicia y reducir la impunidad. No obstante, la implementación de esta reforma enfrentó críticas por posibles riesgos a la independencia judicial y por la inclusión de candidatos controvertidos.
Catalina Botero, exrelatora especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, advirtió que la elección judicial y la desaparición del Instituto Nacional de Transparencia representan un retroceso en la protección de la libertad de expresión en México. Botero afirmó que “se está destruyendo la autonomía del Poder Judicial, que es la última barrera de la protección de la prensa”.
Además, las restricciones impuestas a las campañas electorales, como la prohibición de contratar espacios en radio, televisión y medios impresos, limitaron la visibilidad de los candidatos. Ante estas limitaciones, los medios de comunicación asumieron la responsabilidad de informar al público sobre el proceso electoral y los perfiles de los candidatos.
El Instituto Nacional Electoral (INE) habilitó un micrositio llamado “Conóceles”, donde se presentaban las semblanzas y propuestas de los aspirantes. Sin embargo, la difusión de esta información fue insuficiente para generar un conocimiento amplio entre la población.
Algunos medios y organizaciones civiles organizaron debates y foros informativos para promover un voto informado. No obstante, la cobertura mediática general fue limitada, y muchos ciudadanos expresaron confusión sobre el proceso y los candidatos.
La falta de información clara y accesible contribuyó a una baja participación ciudadana, estimada entre el 12.57% y el 13.32% de los electores. Esta escasa movilización pone en tela de juicio la legitimidad del proceso y refleja la necesidad de una estrategia de comunicación más efectiva en futuras elecciones judiciales.
Ante este panorama, periodistas como Daniel Moreno y Gabriela Warkentin participaron en la creación del Observatorio IBERO sobre el Sistema de Justicia, una iniciativa que busca investigar y visibilizar el funcionamiento del sistema judicial en México, especialmente en el ámbito local.
La elección judicial de 2025 evidenció la importancia de los medios de comunicación en la promoción de procesos democráticos, transparentes y participativos. Para fortalecer la democracia y garantizar una justicia independiente, es esencial que los medios asuman un papel activo en la educación cívica y la difusión de información relevante, especialmente en procesos electorales complejos y novedosos.