Por: Alejandro Castañeda
Twitter: @elaprendiz55

¿Cuántas veces te ha pasado que envías un mensaje o correo electrónico para inmediatamente después arrepentirte? En ocasiones quisiéramos que los mensajes y declaraciones pudieran autodestruirse sin dejar huella a fin de que éstos no llegasen a la persona errada o, vivieran para siempre. Estos pensamientos me hacen cavilar en la popular serie de los 80’s (y la actual saga de películas) “Misión Imposible”. Desearíamos que el mensaje sólo fuera leído por una sola y específica persona para que… al final, SNAP se autoinmolara reduciéndose a cenizas para no volver a existir jamás.

Clases de espionaje
El número de sitios en el internet que explican como espiar a las personas -especialmente por medio de leer su correspondencia o mensajería- es enorme. Con títulos como: “Cómo ver los mensajes de celular de mi novio”(www) “Cómo ver los mensajes del celular de mi pareja” (YouTube) “Cómo ver sms de celulares y descubrir infidelidad” (YouTube) “TextSpy: Cómo leer los mensajes de texto de tu novia” (www) entre muchos, denotan que cualquier persona sería capaz de convertirse en víctima de Wikileaks.

¿En qué estaban pensando?
Es extensa la lista de celebridades que han sido atrapadas por sus mensajes de texto: Desde “Tiger Woods”, cuya esposa leyera sus sms de infidelidad, pasando por el político norteamericano “Anthony Weiner”, enviando fotos de su cuerpo (sexting) a la novia que le cerrara la carrera política y/o “Chris Hansen” de NBC con una serie televisiva (irónicamente, dedicada justamente a exponer estos casos) o los esposos de “Sandra Bullock” y “Reese Witherspoon”, “Jesse James” y “Ryan Phillippe” cuyos textos les llevaran a perder el matrimonio. La lista es larga llegando a “Mel Gibson”, a quien le costara el pago mas alto de divorcio hasta aquel momento.

La experta legal “Vanessa Lloyd Platt”, describe como este enorme incremento en el uso de SMS se ha convertido repetidamente en material evidencial con peso jurídico y añade: “Ha habido un incremento masivo de divorcios debidos a los mensajes de texto vía teléfono; la era electrónica ha sido un verdadero festín para los abogados.”

Una noche de copas…
Todo mundo sabe que -como dice la canción- “una noche de copas, una noche loca” puede causar, a la mañana siguiente, más que una resaca devastadora. Esta es capaz de provocar un cataclismo exponencial y recurrente. Muchos de estos mensajes: e-mails, sms o tweets, son enviados en momentos de euforia u enojo provocados por una alta estimulación emocional, ¡siempre una mala consejera!. Una rabieta que engendra un texto que a su vez provoca una reputación perdida irremisiblemente, la cual se reenvía hasta el infinito.

La grabadora de carrete de “Misión Imposible”
Snapchat, Tiger Text, Wisper y Telegram son algunas de las aplicaciones que tienen sistemas de autodestrucción y confidencialidad que permiten asegurar que el contenido desaparezca, quede confinado y/o no pueda ser reenviado. He ahí el porqué Facebook ha intentando comprar Snapchat desde hace tiempo ofreciendo fortunas increíbles sin conseguirlo. Muchos pensamos, ¿qué hará que los fundadores “Evan Spiegel” y “Robert Murphy” no se decidan a vender con una oferta así de espectacular? ¿Será por orgullo o vanidad o, porque los creadores saben que se devela una nueva corriente que moverá el sistema completo en su beneficio?.

Confidencialidad, la nueva frontera
Ante los acontecimientos que el 2013 trajo relacionados con “la confidencialidad y el espionaje” me pregunto, ¿no estaremos en el umbral de una nueva y provocadora tendencia en internet? ¿La tecnología digital de la confidencialidad? ¿Acaso lo nuevo es que lo escrito y emitido no perdure? ¿Es acaso probable que cada día más nos enfrentemos a sistemas que permitan el control forense (una vez enviado) de lo escrito en cada medio digital posible para no dejar huella?.

En el mismo tópico, ante el reciente escándalo del gobernador de New jersey “Chris Christie”, la reportera “Kristen Salyer” de “Bloomberg” se pregunta ¿Habría podido Snapchat salvar al gobernador del escándalo por el devastador mensaje emitido desde su oficina provocando el cerrado del puente Washington generando un caos que dañara la imagen de su oponente demócrata al no apoyarle en su candidatura? Quien sabe, lo seguro es que “de ahora en delante” bajarán la aplicación.

De acuerdo con “Pew”, continúa la articulista, 86% de los americanos que usan internet han tomado medidas para enmascarar sus huellas electrónico-digitales. Tanto “Google” como “Yahoo” ofrecen ya herramientas para encriptar e-mail´s. Otro servicio llamado “Silent Circle”, ofrece llamadas telefónicas, textos y servicios de video encriptados. Para entender la magno tendencia de “La confidencialidad”, “Snapchat“ procesa cada día más de 400 millones de mensajes autodestructivos conteniendo fotos, video y textos y… sigue en aumento. Si no se puede procesar la ingenuidad y arrebato del emisor, al menos que el mensaje deje de existir.

Me preocupa que el texto pueda auto-desaparecer una vez emitido. ¿Qué sería del gran espectáculo cotidiano que obsequian nuestras raquíticas celebridades televisivas en conjunto con nuestros políticos (o sus familiares) a los ciudadanos para la merecida diversión semanal. No me imagino perder la oportunidad de leer esas joyitas de texto conteniendo sus pretenciosas posturas y petulantes anhelos cada vez que expresan sus enojos ante la sociedad cuando se dan cuenta que… “no todo poseen” y “que no son divinidad como para entrar en cualquier sitio”. ¿Qué será de nosotros sin esa diversión?.