Algo muy interesante está ocurriendo en el mercado del lujo y es el lanzamiento de perfumes por parte de Louis Vuitton.
La marca lidera el segmento con un valor de 28 mil 508 millones de dólares, según estimados de Millward Brown publicados en junio pasado. A pesar de que en su historia había lanzado perfumes, los dejó de comercializar, resultando en algo contrastante, pues liderando el mercado de lujo no contaba con una línea de perfumes, cuando las tres marcas que se encuentran detrás de ella si la tienen.
Estas marcas que se encuentran en el segundo, tercer y cuarto lugar del ranking de Millward Brown son Hermès, con perfumes como Terre de Hermés. Gucci con productos como Guilty o Flora. Mientras que Chanel cuenta con el ya internacional e históricamente famoso No. 5.
Frente a este breve repaso es importante observar la importancia que tiene para el mercado de perfumes la llegada de Louis Vuitton, pues con esto diversifica su marca, lo que da la posibilidad de generar nuevos ingresos.
La campaña de lanzamiento de su nueva línea de perfumes será protagonizada por la actriz francesa Léa Seydoux, una embajadora de marca con la que ha venido trabajando diversas campañas como la fotografiada en el rancho de Luis Barragán en México.
La nueva campaña que presentará la colección de perfumes tiene importantes recordatorios. El primero nos hace mirar a una industria de fragancias con un valor de mercado de 40.1 mil millones de dólares a nivel mundial para este 2016, según trefis.com, firma que proyecta que este valor llegue a los 43.6 mil mdd en 2021.
Estos números son nada despreciables cuando se habla del futuro de un mercado de lujo que se podría ver afectado en algún momento, cuando variaciones como un dólar fortalecido ante monedas emergentes o sucesos geopolíticos como el Brexit, que significó la salida de Reino Unido de la Unión Europea, impactan en el encarecimiento de estos productos en determinados mercados.
También nos recuerda todo un segmento de marketing representado por perfumistas o “narices” que funcionan como embajadores en una colaboración marca personal – comercial, donde el resultado se mide en la reputación e historia con la que cuentan estas personalidades como Jacues Cavallier o Jimmy Boyd.
Es importante ver que los perfumes terminan convirtiéndose en productos que sirven como estrategias de marketing a través de los cuales se puede experimentar con las marcas de lujo de una forma más personal, de ahí que la apuesta sea por resaltar los géneros del mercado al que se está dirigiendo pues en la medida en que se logra llevar al consumidor a un estatus aspiracional, se habrá logrado un engagement que se traduce en consumo y simpatía por la marca.
