Buenos Aires, Argentina.- Los fabricantes de juguetes es la Argentina están felices. Es que la industria del sector proyecta un crecimiento del 10 por ciento para 2012, con lo que cuatro de cada 10 productos que se vendan en el país serán de origen nacional. El recorte a las importaciones (casi no se ven las marcas Hot Wheels y Barbie) es una de las razones.
Para Miguel Faraoni, presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), “el freno a las importaciones” es una de las razones. “Consideramos que el consumo de juguetes nacionales tiene que ganar espacio. Nos preparamos para un crecimiento de cerca del 10 por ciento para este año”, aseguró a los medios.
La parte del año que está por venir es la mejor para los vendedores de juguetes en la Argentina (Día del Niño en agosto y Navidad en diciembre), por eso, será tiempo de saber si el sector industrial logró fabricar suficiente stock en el primer semestre. Para el directivo, se espera que los juguetes nacionales alcancen el 40 por ciento del mercado local.
El sector del juguete en la Argentina se recupera en forma pareja desde 2003, cuando representaba el 10 por ciento del mercado. “Esto fue posible por el compromiso de inversión de las empresas para sumar tecnología, pero además por el respaldo estatal a partir de las licencias no automáticas y otras medidas de control del comercio exterior que protegieron nuestra industria”, explicó en relación con la competencia china.
Un dato importante es que la industria nacional todavía no puede suplantar todos los productos importados, en particular aquellos que requieren mayor inversión tecnológica. Además, otros productos como Hot Wheels o Barbies, cuyos importadores no compensan el ingreso con exportaciones, suelen escasear en las jugueterías.
Otro detalle: en los últimos años el sector comenzó a exportar y destina el 8 por ciento de su producción a países limítrofes y de Centroamérica.
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