Desde hace tiempo, compañías tecnológicas se han convertido en referente en innovaciones en dispositivos electrónicos, así como en técnicas laborales, ya que incluso algunas de ellas se han vuelto las “más deseadas” para trabajar, según diversos sondeos.

Es conocido que compañías como Google, Amazon, Google o Facebook tienen la filosofía laboral única, aunque parecida, por lo que cualquier aspirante a empleo debe tomar en cuenta aspectos como la cultura empresarial, además de que sus grados académicos no son definitorios para obtener un empleo. Asimismo, la mayoría busca candidatos emprendedores, con iniciativa y que no mencione palabras tontas durante su entrevista laboral.

No obstante, aunque sean accesibles para cualquier joven emprendedor, las firmas tecnológicas como Facebook, Apple y Google tienen protocolos estrictos, de tal modo que los aspirantes que los incumplan quedan descartados. De acuerdo con Business Insider, los candidatos a empleo suelen cometer estos errores:

Ser más específico de por qué quieres trabajar en esa empresa. Al parecer, no es suficiente querer trabajar en Google, ya que se tiene que ser muy específico demostrando que te apasionan aspectos relacionados con esa compañía.

Alardear. No centrarte en hablar sobre ti mismo todo el tiempo, ya que las personas que usan el pronombre “yo” en las entrevistas “suelen ser un fracaso” como profesionales, según analistas, ya que la mayoría de estas compañías requieren un alto grado de colaboración. Lo correcto será abordar tus experiencias, alineadas con los valores de la compañía.

No formular preguntas a los reclutadores. La falta de curiosidad mata cualquier prospecto de trabajo en Apple, según Insider, ya que está mal visto decir “no tengo preguntas”, ya que lo ideal es hacer preguntas para demostrar que se toma en serio la compañía, así como curiosidades sobre la compañía en específico.

Ser demasiado planos. JP Morgan recomienda incluso “tener una broma en la manga”, ya que incluso algunos reclutadores pedirán algún chiste al candidato, ya que dicha característica representa para estas compañías “pensar con los pies”, es decir, tomarse las cosas con calma y no sobre saturarse de pendientes.