Todo lo que no decimos con palabras influye de manera significativa en la percepción que tiene el mundo sobre nosotros. Se dice que entre el 60 y 70 por ciento de lo que comunicamos como individuos lo hacemos de forma no verbal; cuando hablamos de eventos y reuniones corporativas, esto cobra la misma importancia, por lo que debemos de estar conscientes de que cada detalle, por mĆnimo que parezca, determinarĆ” la experiencia con la que se quedarĆ”n los asistentes.
Cada marca tiene una personalidad propia, es un ente con caracterĆsticas bien definidas las cuales deben de ser el parteaguas del meeting planner a la hora de diseƱar una estrategia que servirĆ” para que el evento cumpla las expectativas y logre expresar justo lo que la marca desea.
Existen muchas maneras de transmitir los mensajes clave de una compaƱĆa. Un evento representa una oportunidad invaluable para mantener cautiva a las audiencias que nos interesan por una, dos horas o varios dĆas, dependiendo del formato. Es en este caso cuando todos los detalles cuentan, por mĆnimos que parezcan.
Hoy en dĆa, el alto nivel de profesionalización que ha logrado la industria de organización de eventos exige que el meeting planner cuente con la capacidad de lograr que el perfil de la empresa sea consistente con lo que Ć©sta comunique en cualquier evento que lleve a cabo.
Cuando un cliente se acerca a nosotros para compartirnos la idea de evento que tiene en mente, es nuestra responsabilidad ofrecerle una adecuada asesorĆa con el fin de guiar al evento hacia un derrotero exitoso y proyectar justo lo que a la empresa le interesa, ni mĆ”s ni menos.
El organizador de eventos debe ser capaz de leer a su cliente y realizar las recomendaciones pertinentes para que todo marche sobre ruedas y en todos los casos es prioritario que estĆ© al tanto de que todo lo que ocurra en la reunión estarĆ” Ćntimamente ligado a la percepción que se tenga de la empresa.
En un evento corporativo o reunión se deben cuidar todos los aspectos, no sólo el perfil de los speakers y sus mensajes, sino también aspectos como la invitación, la persona que recibe a los asistentes, el módulo de registro, la decoración, la música, el menú y el tipo de bebidas que se ofrecerÔn. Es fundamental que todo vaya acorde al perfil de la empresa y justamente a lo que busca comunicar con su evento.
Como profesionales en la organización de eventos, debemos de tener el expertise que nos permita proyectar una comunicación verbal coherente con el perfil de cada empresa, y eso sólo se logra con una vasta experiencia basada en cientos y cientos de eventos realizados. Nuestro trabajo se acercarÔ a la excelencia cuando logremos que un cliente deposite su confianza en nosotros y nuestra participación en el desarrollo de sus eventos sea cada vez mejor, con el tiempo deberemos de conocer a la perfección el ADN de la empresa y el mensaje directo o indirecto que quiere ofrecer a sus invitados.
Esta experiencia que se consigue a lo largo de los años habla de una gran profesionalización de la industria de reuniones y de la evolución positiva que ha conseguido, pues hoy por hoy logramos plasmar las ideas de los clientes utilizando todos los recursos no verbales que constituyen los aspectos mÔs importantes de un evento y en lo que debemos de enfocar nuestros esfuerzos.