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Kanye West rompió relaciones con adidas, tras comentarios antisemitas.
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El caso de Adidas nos recuerda al de Funko, que también se deshizo de inventario excedente.
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Adidas es de las marcas líderes en apparel, según estimados de la firma Brand Finance.
Adidas tiene una solución para los tenis que se quedaron sin vender y lanzó en colaboración con Kanye West, demostrando el reto en operaciones con que cuentan.
Cuando NFIB llevó a cabo un estudio, la firma descubrió que entre los principales retos para los negocios, el 26 por ciento consideró la inflación entre los desafíos, seguido de un 24 por ciento que votó por la calidad del trabajo.
“Durante una encuesta sobre pequeñas empresas en los Estados Unidos durante enero de 2023, alrededor del cuatro por ciento de los encuestados afirmó que el problema más importante para las pequeñas empresas eran las ventas deficientes. Sin embargo, alrededor del 26 por ciento de los encuestados dijo que la inflación era el problema más importante para su negocio.”, explicó Statista en exclusiva a suscriptores de la plataforma, al presentarles el anterior estudio.
A seguir los pasos de Funko
Tal como supimos este lunes, que Funko se desharía de un importante lote de muñecos que no vendió, Adidas podría seguir los mismos pasos con todos los tenis que diseñó con Kanye West y no vendió tras la polémica separación con el cantante.
La marca alemana se encuentra en una encrucijada operativa, pues desde que Kanye West lanzó comentarios antisemitas, que después justificó como una estrategia para deshacerse del contrato con Adidas, la compañía se quedó con un inventario valorado en 500 millones de dólares.
Primero se polemizó que este inventario se vendería sin el logo de Yeezy, posteriormente se supo de un acuerdo que estarían ultimando tanto Adidas como West, para dar con la venta de estos productos, que alcanzarían los mil millones de dólares.
Ahora que las negociaciones han llegado a un punto de no retorno, las opciones parecen indicar que Adidas tendría que quemar todo el inventario que se quedó sin ventas, esto lo advirtió The Washington Post en una nota donde se da pistas que como Funko, Burberry, Coach o Louis Vuitton, la marca se desharía de sus productos incinerándolos.
Esta fórmula recientemente fue dada a conocer por Funko, que aseguró en sus resultados financieros, que registró una caída de 108 por ciento en sus ingresos, debido, explicó Brian Mariotti, CEO de Funko, a “una combinación de factores macroeconómicos y problemas específicos de Funko”.
Para hacer frente a su esquema de pérdidas, la directiva anunció que destruiría el exceso de iventario para tener una amortización de entre 30 y 36 millones de dólares, lo que fue más rentable que invertir en la venta de todas las figuras.
“El inventario al final del año totalizó en 246 millones de dólares, un aumento del 48 por ciento en comparación con el año anterior. Esto incluye el inventario que la Compañía tiene la intención de eliminar en la primera mitad de 2023 para reducir los costos de cumplimiento al administrar los niveles de inventario para alinearlos con la capacidad operativa de nuestro centro de distribución”, explicó.
Estos casos son referentes de cómo las empresas están lidiando con inventarios desafiantes en el mercado, ante una demanda del consumidor más cauta y diversificada, por lo que el ingenio de las marcas para vender, lleva a algunas a resurgir como Fenix, de las cenizas de productos que queman para seguir relevantes en el mercado.
