La industria de los alimentos es un mercado bastante competitivo por diferentes marcas alrededor del mundo, tanto en supermercados como en mercados “comunes”. De estos, hay para todo tipo de público cuyas necesidades los orientan a elegir algunas franquicias en específico, sin embargo, los precios pueden llegar a variar considerablemente por lo que a algunas personas el dinero no alcanza para comer. 

De acuerdo con datos del Observatorio Shopper Experience de in-Store Media México, se concluyó que el gasto promedio de los mexicanos en supermercados ronda entre los 2 mil 708 pesos al mes, teniendo entre los pasillos de alimentos más concurridos un 88 por ciento en abarrotes, 64 por ciento en lácteos, 47 por ciento cereales y galletas en un 34 por ciento.

En México, se pueden elegir entre diferentes opciones para satisfacer diferentes necesidades gracias al sector retail, ya sea para encontrar productos a precio de mayoreo como aquellos en menudeo, entre ellos: Walmart, Superama, Bodega Aurrera, Soriana, Chedraui, entre otros.

A pesar de estos supermercados, aún existen algunos otros que van a clientes con gustos más “exclusivos” (City Market, Fresko, Chedraui Selecto, etc.), donde podemos encontrar alimentos más caros de valor premium o gourmet, como ciertos cortes de carne de alta calidad. Sin embargo, visitar uno de estos pueden llegar a representar ventas mucho más elevadas (incluso hasta 4 veces), por lo que estos no están dirigidos a la población “promedio”.

México y la canasta básica de alimentos

Para entrar más en contexto, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, hasta enero del 2019 un hogar mexicano podría comprar una canasta básica de 80 productos que incluía tortillas, huevo, leche, verduras, frutas y carne por aproximadamente 1,165 pesos, por lo que el supermercado no es una opción viable.

Teniendo en cuenta que de igual forma un hogar conlleva otro tipo de gastos como luz, agua, gas, mantenimiento del hogar y el pago de otro tipo de servicios indispensables para la vida diaria como el transporte, esto provoca que en ocasiones, las familias mexicanas se vean batallando para poder librar las cuentas a final del mes.

A pesar de esto, de acuerdo con datos del Inegi en julio 2021, de los 57.1 millones de mexicanos que cuentan con un trabajo renumerado, 17.1 millones ganan de 0 a 3,968 pesos, 30.5 millones ganan de 3,968 a 18,823 pesos y 1.1 millones ganan más de 18,483 pesos, por lo que claramente no todos puede darse el lujo de ir a un supermercado ya que el dinero no les alcanza para comer.

Alimentación básica, un problema en países de América

La escasez de alimentos en las familias no es un problema exclusivo de México, sino que otros países latinoamericanos tienen constantes problemas para poder solventar estos gastos indispensables del día a día, teniendo que poner que elección hacia donde invertir los gastos monetarios en millones de hogares semanal y mensualmente. Si bien, para algunos hogares alrededor del mundo tener complicaciones económicas es problema de una mala administración del dinero, para algunos otros los ingresos representan un problema más allá que una simple mala administración.

Statista muestra en su estudio de “Cuando el dinero no alcanza para comer” que este la mitad de la población en diversos países latinoamericanos, tienen complicaciones en cuanto al acceso a comida suficiente para alimentarse, ubicándose México en la posición número 13 de 18 países.

¿Cuál sería una estrategia efectiva para erradicar esta situación?