A finales de febrero circuló información a través de diversos medios y agencia que la tecnológica japonesa Sharp aceptaría una oferta de Foxconn, conocida previamente como Hon Hai Precision Industry para adquirir de dos terceras partes de la compañía.

De acuerdo con datos difundidos el mes pasado, la taiwanesa había hecho una oferta para adquirir Sharp por la cifra de 5 mil 887 millones de dólares. Sin embargo, información que circula este día por varios medios como Wall Street Journal y Reuters señala que Foxconn busca reducir su oferta de compra en amenos 100 mil millones de yenes (aproximadamente 893 millones de dólares).

Los motivos por los que la tecnológica de Taiwán intenta reducir el monto de su inversión después de que Sharp reveló posibles obligaciones no divulgadas previamente. Además, solicitó a la empresa japonesa más información sobre sus últimos negocios.

El regateo ya afectó de forma negativa a la marca Sharp, de acuerdo con información de Europa Press, la agencia de calificación crediticia Standard & Poor’s (S&P) rebajó su calificación a la tecnológica japonesa, ahora se ubica en ‘CCC’, lo que en términos no financieros se puede interpretar como “muy pobre”.

Sharp tiene fuertes problemas financieros desde hace algunos años, y sus obligaciones con los acreedores lucen muy complicadas dada su situación, algo que se agrava con los titubeos de Foxconn, lo que es visto como una debilidad por parte de la calificadora.

El fuerte de la tecnológica japonesa fueron las pantallas y calculadoras, per con su adquisición por Foxconn podría recibir un giro importante, sobre todo si se considera que desde antes de que se llevara a cabo esta compra, Sharp ya fabricaba algunos paneles para el iPhone, uno de los clientes más importantes de su nueva casa matriz. Microsoft y Sony son otras compañía para la que fabrica diversos productos.

En el mercado mexicano Sharp tenía presencia con uno de sus últimos desarrollos tecnológicos, su línea de pantallas Aquos que, hasta hace unos años (2005) estuvo en aparadores destacando sus 65 pulgadas la más grande del mercado -según la compañía- hasta ese entonces.