Uber tiene la idea de ser neutral en carbono para el año 2040. Si bien la empresa de transporte ha incluido a América Latina en esa ruta, sabe que los desafíos son enormes.
La dificultad en la región es que, según lo ha reconocido la propia compañía, la poca inserción de los vehículos eléctricos es un verdadero problema a resolver.
En muchos de estos casos, como en México, la estrategia es la de la “compensación”, es decir, seguir contaminando con los vehículos, pero a la vez pagarle a otra empresa para que tome medidas favorables al clima.
El “Uber Planet” que rige desde febrero de 2021 va en ese sentido: por 37 centavos adicionales por kilómetro, los mexicanos pueden contribuir a la compra de créditos de carbono para proyectos de reforestación y para un parque eólico en Oaxaca.
Algo similar, Uber lleva adelante en Colombia, Ecuador y Costa.
Datos de JD Power publicados por Reuters dicen que los vehículos eléctricos e híbridos son sólo el 6,4 por ciento del mercado automotriz de México, menos de la mitad que el promedio global (15 por ciento).
Y hacia el futuro las proyecciones no son buenas: 12 por ciento del total de autos de México serían eléctricos o híbridos para 2030, frente al 50 por ciento previsto a nivel global. Muy lejos.
El proyecto eólico Oaxaca IV representa cerca del 16 por ciento de las compras de créditos de carbono de Uber Planet en México, según datos de la web de Uber.
En CDMX, Uber está soportando la presión de una creciente competencia como Beat Tesla, con una flotilla 100% eléctrica de Tesla. Además, Didi Global asegura tener 1.600 vehículos híbridos o eléctricos en México.
Uber México y la estrategia con el medio ambiente
Según reconoció Uber, en los próximos meses la compañía tomará medidas para alentar a más conductores a cambiar a carros eléctricos o híbridos. Uber espera ofrecer precios en promoción para estos vehículos e incentivar la adquisición con 10 mil pesos adicionales por 160 viajes.
El objetivo es que más de 610 de sus conductores en México cambien a un vehículo eléctrico o híbrido en 2022.
En la actualidad, Uber tiene más de 200 mil choferes y socios de entrega en México, dice Reuters.
El problema es el alto valor de los carros eléctricos, que los deja fuera del alcance de la mayoría de los potenciales compradores. Los mexicanos tienen un salario promedio diario menor a 21 pesos.
Para peor, no hay incentivos fiscales ni infraestructura de recarga para convencer a los conductores a cambiar.