• El peso mexicano cotiza en 20.85 unidades a la venta en los bancos

• La amenaza de Trump sobre la permanencia de los migrantes en la frontera norte afectó a la moneda

• Se espera que durante la semana la divisa nacional fluctúe en el terreno negativo

Diversos factores han impactado de manera negativa al peso mexicano, la mayoría de ellos son factores internos, en especial los que tienen que ver con la próxima administración al mando de Andrés Manuel López Obrador.

Motivo por el cual, durante las últimas semanas la moneda mexicana ha perdido fuerza frente al dólar, lo que la coloca como una de las divisas más débiles en la paridad con el billete verde.

Este lunes, la moneda local presentó un nuevo revés en su cotización frente al dólar al depreciarse 0.41 por ciento; de esta forma, según El Economista, el tipo de cambio se ubica en los 20.49 pesos por dólar, lo que significa una caída de 0.08 centavos.

Por su parte, en ventanilla bancaria, de acuerdo con datos de Citibanamex, el billete verde se vende en 20.85 pesos.

Y es que la semana comenzó con un evento que impactó a la divisa mexicana, misma que se intensificó luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, emitiera un mensaje en Twitter contra las caravanas migrantes.

El mandatario estadounidense exigió a México que los centroamericanos que esperan en la frontera norte regresen a sus países de origen y amenazó con un cierre definitivo al cruce entre ambos países.

Riesgo.

La semana que está comenzando representa un riesgo para los indicadores económicos y financieros nacionales, derivado de la toma de protesta de López Obrador el sábado entrante, además de la tensión que se vive por la relación comercial entre China y Estados Unidos.

Durante la cumbre del G-20, se prevé una reunión entre ambos mandatarios, lo que marcará la atención de los inversionistas.

De tal forma que en la época de mayor consumo, la incertidumbre económica puede representar un factor en contra tanto de los comerciantes como de los consumidores, ya que los gastos destinados a la compra de productos podría reducirse a la espera de un mejor momento.