La tecnología actual es una máquina sin parar de hacer contenidos, ha logrado que las grandes televisoras o productoras de cine, se adapten a ser ahora las grandes abastecedoras de las plataformas digitales, la información buena y falsa, ahora sucede cada tres segundos a un minuto, en promedio, un nuevo video en YouTube, un tuit, una foto nueva, un nuevo documental, el nuevo juego de video, la nueva serie, clics en la web, likes en Facebook, geolocalización de teléfonos celulares, los datos de nuestras cuentas de redes, nuestros correos…el mundo es hoy por hoy un mundo de “Datos”.
La cuestión es reflexionar acerca de que filtros usamos para seleccionar la información que nos llega, en un mundo en que todo se consulta con el “Dios Google”, en muchas de nuestras decisiones cotidianas somos guiados por la inteligencia artificial. ¿Como podemos saber realmente que información está siendo dirigida específicamente a nosotros?, a menos que el cibernauta sepa de leyes, de normas de derechos fundamentales, o de neuromarketing y propaganda, difícilmente se darán cuenta de cómo están siendo engañados para consumir publicidad ficticia, o simplemente consumir información falsa.
Tomamos decisiones a veces, trascendentales en nuestras vidas, con información que ni siquiera es auténtica, original. Se habla mucho de crear una “Curaduría” de selección de información,
Este es un problema que ya se están enfrentando en las grandes empresas, de los mismos gigantes tecnológicos es tanta la información que producen en su interior que no saben como seleccionar entre tantos datos.
Me gusta mucho el análisis de Michael Bhaskar, que nos habla del tema de la Curaduría como filtro ante tanta información, afirma que la información digital crece cuatro veces más rápido que la economía mundial, y que cada persona viva hoy tiene más de 320 veces más información de la que había en la biblioteca de Alejandría. La saturación de la información está generando costos muy altos.
La saturación tiene que ver no sólo con la información sino con el consumo y la llamada “saturación material”, que genera ansiedad y una necesidad de tenerlo todo rápido.
Toda esta avalancha de consumo y de ansiedad son fenómenos que se han visto incrementados a partir de la pandemia COVID-19, donde la saturación sobre temas de salud, venta de remedios, de antisépticos, desinfectantes, tapabocas, convirtió a muchos en especialistas. Páginas llenas de doctores que daban consejos y recomendaban medicamentos, y nuevamente nos preguntamos ¿dónde están los filtros de Calidad y veracidad?
Si alguien duda, acerca de quienes son los grandes generadores de riqueza en la actualidad, y de saturación en todos los sentidos, veamos las ventas de Amazon tan sólo el año pasado, superaron los 33.400 millones de dólares en 2021. Las cuentas muestran un beneficio neto de 33.400 millones de dólares, una gran diferencia frente a los 21.300 millones de dólares que logró obtener el año anterior, con lo que sus acciones en Wall Street tuvieron un impulso del 13 por ciento.
Tan sólo el primer trimestre del año 2021 La plataforma de video más grande del mundo YouTube generó $ 7.205 mil millones en ingresos publicitarios durante el período, un aumento anual del 43 por ciento. En el mismo periodo de tiempo, en cuanto a ingresos, la empresa dijo obtener 7,709 millones de dólares, lo cual representa un crecimiento del 16 por ciento respecto al primer trimestre del 2021.
Sólo espero queridos lectores, que este fin de semana puedan ver todos los videos que les faltan de YouTube, todos los nuevos estrenos de series, si les queda tiempo leer los libros que compraron esta semana, y si festejan con sus hijos el día del padre, todos los nuevos juegos de video que hay, por no hablar de todas las ofertas que están en las grandes plataformas de consumo masivo.