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Según el AI Index Report de la Universidad de Stanford, el uso de modelos de lenguaje se ha disparado en la vida cotidiana.
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El 55% de usuarios encuestados afirmaron que consultan regularmente herramientas como ChatGPT.
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Según un reporte de Pew Research Center, el 31% de los adultos estadounidenses ya han probado la IA para fines que califican como “decisiones personales complejas”.

Una mujer decidió probar suerte en Las Vegas, el lugar más icónico del mundo para los juegos de azar, pero con un giro inesperado: utilizó la intuición de ChatGPT para guiar sus apuestas.
La historia se dio a conocer a través de redes sociales, donde la usuaria explicó que al principio comenzó a jugar siguiendo únicamente su propia intuición. Como era de esperarse, perdió algo de dinero en sus primeras jugadas. Sin embargo, en lugar de rendirse, decidió cambiar de estrategia y pidió ayuda a la inteligencia artificial de OpenAI.
Usando las recomendaciones de ChatGPT para realizar una jugada “más intuitiva”, la mujer volvió a apostar. El resultado fue sorprendente: en tan solo 9 minutos logró ganar 56 dólares.
Aunque la cantidad no es millonaria, la experiencia fue suficiente para que ella concluyera que sí funciona, aunque reconoció que, al tratarse de juegos de azar, siempre hay un riesgo.

El caso ha generado conversación en redes, donde algunos usuarios se preguntan si este tipo de herramientas podrían cambiar la manera en la que se participa en dinámicas como el casino, donde la intuición, la estadística y ahora la inteligencia artificial se mezclan.
Tal parece que la IA no solo está transformando el trabajo o la educación, sino que también comienza a tener impacto hasta en los juegos de azar.
En ese sentido, según un informe de McKinsey & Company, más del 70% de los usuarios frecuentes de herramientas de IA las utilizan para apoyar decisiones fuera del ámbito laboral, desde qué comer hasta cómo invertir dinero o resolver conflictos personales. Esto evidencia cómo la confianza en la inteligencia artificial ya no se limita a entornos técnicos.
Sin embargo, es importante entender que los modelos como ChatGPT no tienen acceso a información en tiempo real ni pueden predecir resultados aleatorios. Su fortaleza está en ofrecer razonamientos lógicos y estructurados, no en garantizar resultados. En juegos de azar, por ejemplo, pueden ofrecer consejos genéricos sobre gestión de riesgos o explicar probabilidades, pero no pueden alterar las posibilidades matemáticas del juego.
Aun así, el simple hecho de que personas recurran a la IA antes de tomar decisiones en contextos tan inciertos como un casino, plantea una pregunta interesante: ¿qué tanto estamos delegando nuestras decisiones personales a sistemas entrenados para simular el razonamiento humano?
El fenómeno también refleja una tendencia más amplia: el deseo de encontrar certeza en lo incierto, usando herramientas tecnológicas que, aunque no tengan intuición ni emociones, ofrecen respuestas rápidas, convincentes y accesibles.
En este sentido, más allá de si la IA puede “predecir” o no una jugada ganadora, su papel como influencia psicológica y guía estructurada en entornos volátiles está apenas comenzando a explorarse.
Y es que incluso también ya es usada como guía de turistas.
@gracearagonm Resolvió 😂 #aventuras #viajestiktok #viajando #naturaleza #recomendacionesviajes #chichenitzá #mexico #chatgpt #tipsdeviaje #viajesamigos ♬ sonido original – Grace Aragón
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