Mientras en el mundo crece la atracción de los vehículos con conducción autónoma, así como la atracción de los consumidores hacia todas las formas de automatización, en nuestro país los jóvenes parecen no estar interesados en este tipo de automóviles.
Datos del Estudio Global del Consumidor Automotriz, realizado por Deloitte, señalan que en los últimos dos años la atracción de los consumidores hacia los autos autónomos ha disminuido, así como la intención de pagar más por ellos, sin embargo, la generación Z parece dispuesta a pagar más por las tecnologías en vehículos.
Ante el cambio de opinión en México, en Estados Unidos el 68 por ciento de los jóvenes aseguraron que cambiarían su opinión con base en las pruebas sobre los beneficios de la conducción autónoma.
Tanto para los mexicanos como para el resto de países, las capacidades más reconocidas de ese tipo de autos fue: reconocer objetos en la carretera, informar al conductor de situaciones peligrosas, ayudar en una emergencia médica y bloqueo de conducción en situaciones peligrosas.
Los conductores más interesados del mundo en la conducción automática fueron los de China, ya que más de la mitad de los encuestados refirió que preferían un auto híbrido, batería eléctrica o cualquier vehículo de propulsión alternativa.
En cuanto a los mexicanos, se mostraron desmotivados de el tiempo de espera de carga para el vehículo, solo el 52 por ciento está dispuesto a esperar máximo una hora para cargar completamente un vehículo, aunque los tiempos de carga son mucho más largos, mientras que el 71 por ciento de los encuestados mexicanos desearía que las distancia mínimas de recorrido sean de 240 kilómetros con carga completa.
No obstante, los servicios de transporte es la industria que parece estar lista para adoptar las nuevas tecnologías, ya que países como Estados Unidos, India, China, Corea del Sur y Alemania tienen la infraestructura para albergar centros de carga y servicios de transporte aunque los usos sean mínimos en la actualidad.