Nestlé anunció este jueves que tiene planes de vender su negocio dedicado a la salud de la piel, en un movimiento que alimenta las expectativas sobre su intención (conocida desde hace tiempo) de deshacerse de su participación de US$ 30.400 millones en L’Oréal de Francia.
Mark Schneider, director ejecutivo, dijo que había llegado a la conclusión “de que las futuras oportunidades de crecimiento de Nestlé Skin Health se encuentran cada vez más fuera del alcance estratégico del grupo”.
Nestlé Skin Health fue reestructurada en 2017 con la idea de recomponer su rentabilidad. Fabrica y vende medicamentos bajo receta para el cuidado de la piel, removedores de arrugas y otros productos para la salud.
Según Financial Times, podría valer alrededor de US$ 7.200 millones. Para Wall Street Jounal, el valor sería de alrededor de US$ 4.100 millones.
Schneider dijo que “explorarán opciones estratégicas”, con lo que dejó la puerta abierta para una posible alternativa a la venta, que podría ser una escisión.
Nestlé Skin Health se formó a partir de Galderma, un grupo de dermatología suizo que la multinacional había operado previamente junto con L’Oréal. Tomó el control total en 2014 a cambio de US$ 3.050 millones de sus acciones en la compañía de cosméticos francesa.
Alimentos y bebidas
Esta decisión de dejar el negocio de la salud de la piel reduce aún más las pocas posibilidades de que Nestlé retenga su participación en L’Oréal (tiene el 23%). Esas acciones fueron compradas originalmente en 1974, cuando la heredera de L’Oréal, Liliane Bettencourt, temió ser nacionalizada por Francia.
Al deshacerse de Nestlé Skin Health, el grupo suizo se concentrará en lo que realmente sabe hacer muy bien: los negocios de alimentos y bebidas, con marcas que incluyen las barras de chocolate KitKat, el agua embotellada Perrier y la comida para mascotas Purina, entre otras miles de marcas.
Para demostrar que quiere dejar los negocios paralelos, a principios de esta semana Nestlé anunció la venta de su compañía de seguros de vida Gerber a Western & Southern Financial Group por US$ 1.550 millones.
Las decisiones de Nestlé tienen, entre otras razones, una explicación coyuntural: desde hace meses enfrenta presiones del fondo de cobertura Third Point, que pidió cambios más rápidos y audaces al mayor grupo de alimentos del mundo.