Si algo le faltaba a Donald Trump para complicar aún más su imagen como presidente de los Estados Unidos era que su ex esposa y su actual mujer se pelearan en público.
Eso ocurrió este lunes, cuando la primera esposa, Ivana Trump, dijo en una entrevista en TV: “Soy la primera esposa de Trump; soy la primera dama”. Esas polémicas declaraciones derivaron en un comunicado público de respuesta de Melania, la actual mujer del magnate.
“Según medios de Estados Unidos, nunca antes en la historia se había registrado una polémica de este tipo entre la esposa actual y la ex de un presidente de Estados Unidos. ¿El centro del debate? A quién le corresponde ser llamada primera dama”, analiza la BBC.
Los responsables de marketing del presidente estadounidense tienen problemas para sostenerlo en pie tras sus habituales declaraciones en Twitter, pero esto ya es el colmo. “No quiero causar ningún tipo de celos o algo así, porque básicamente soy la primera esposa de Trump. Soy la primera dama, ¿de acuerdo?”, dijo Ivana en un programa en el que estaba promocionando un libro sobre su vida. Allí se puede hallar la explicación para sus palabras: su relación con el presidente es parte central del libro que saldrá a la venta este martes.
Ivana Trump y una frase que despertó la furia de Melania: “Yo soy la primera dama” https://t.co/auhEI72fXS pic.twitter.com/Bl3p8JqSXd
— LA NACION (@LANACION) 9 de octubre de 2017
La ex modelo checa dijo tener el número directo de la Casa Blanca y explicó que habla “con el presidente cada dos semanas”, y que le da consejos. Ivana Trump es madre de Donald Jr., Ivanka y Eric Trump, y fue cónyuge del magnate entre 1977 y 1992.
Melania, la actual pareja, también ex modelo pero de origen esloveno, dio a conocer a través de su jefe de relaciones públicas un comunicado respecto de las declaraciones se la mujer de Trump.
? Melania Trump responde a Ivana Trump por definirse como “la primera dama” https://t.co/tojZIOsQ3l ▶️@ActualidadRT pic.twitter.com/ksfhMDASTW
— Pablo Guzmán (@PabloGuzmanDice) 10 de octubre de 2017
Stephanie Grisham, el portavoz de la primera dama, dijo que Melania Trump “ha hecho de la Casa Blanca un hogar para (su hijo) Barron y para el presidente, que ama vivir en Washington y que esta honrada por su título de primera dama de Estados Unidos”. Esto en respuesta la frase de Ivana de horas antes: “Debe ser terrible vivir en la Casa Blanca”.
Melania dijo también que no consideraba utilizar su posición para vender libros [como la ex mujer de Trump], sino para “ayudar a los niños”. “Claramente no hay sustancia en las declaraciones de una ex. Esto desafortunadamente no es más que una búsqueda de atención para su propio interés”, indicó.
Ronald Reagan había sido, hasta la llegada de Trump, el único divorciado en ocupar la Casa Blanca.
