La franquicia es un modelo asociativo por excelencia en donde si cada uno hace la parte que le toca, todos ganan. Un trinomio perfecto del dueño de la marca, el inversionista y los proveedores. No esperes que tus franquiciatarios hagan bien su trabajo si tĂș no haces el tuyo. En el mundo de las franquicias, regularmente hay una declaraciĂłn de parte de franquiciantes (dueño de la marca) frase que escucho con frecuencia: “Ese franquiciatario (quien adquiriĂł la franquicia) no sigue las reglas, no funcionĂł. No le echĂł ganas. No siguiĂł el modelo. No tenĂa perfil.”
Y aunque en algunos casos esto puede tener algo de verdad, lo cierto es que, en la gran mayorĂa de las veces, el fracaso de una unidad franquiciada es consecuencia directa de errores, omisiones y falta de experiencia por parte del propio franquiciante. SĂ, leĂste bien. En el ecosistema de franquicias, no basta con tener una marca atractiva, ni un producto exitoso. Lo que realmente hace sostenible una red es el trabajo permanente que realiza la marca para estructurar adecuadamente su modelo, transmitir el conocimiento con eficacia, dar soporte oportuno, vigilar el cumplimiento de los estĂĄndares y generar valor continuo para sus franquiciatarios, lo que se verĂĄ reflejado en un estado de resultados sano. Si alguna de estas piezas falla, el sistema entero tambalea.
Uno de los errores mĂĄs comunes que cometen los empresarios al convertir su negocio en franquicia es asumir que, una vez vendida la primera unidad, el resto del trabajo “ya estĂĄ hecho”. La falsa creencia de que franquiciar es solo âvender franquiciasâ. Nada mĂĄs alejado de la realidad. El verdadero trabajo del franquiciante empieza el dĂa que decide estructurar y transformar su empresa para convertirse en una empresa operadora de franquicias; y el dĂa que firma con su primer franquiciatario es el dĂa en que verdaderamente arranca el trabajo de a de veras. Es muy fĂĄcil sentarse en la silla del corporativo y esperar que las unidades operen bien sin que exista una estrategia clara de soporte, capacitaciĂłn continua y mejora operativa. Es cĂłmodo pensar que, si una sucursal no funciona, es culpa del operador. Pero la pregunta incĂłmoda es: ÂżQuĂ© tanto hiciste tĂș como franquiciante para que tuviera Ă©xito?
El fundamento principal de crecer con franquicias es la escalabilidad. Si el modelo no estĂĄ bien estructurado, no es replicable y todo fracasa. Pero esto no es magia, ni surge por accidente. Se necesita una ingenierĂa empresarial sĂłlida que convierta los procesos, experiencias y saberes acumulados del negocio original en documentos, manuales, herramientas y entrenamientos concretos. Cuando una franquicia fracasa, muchas veces encontramos principalmente que:
- Los manuales estaban incompletos o desactualizados.
- La capacitaciĂłn inicial fue improvisada o insuficiente.
- No habĂa procesos estandarizados o eran difĂciles de aplicar.
- La cadena de suministro es ineficiente.
- Los costos reales no se conocĂan o no estaban alineados con la operaciĂłn del franquiciatario.
- El programa de supervisiĂłn es ineficiente y no ayuda a la mejora continua y no garantiza los estĂĄndares de la marca.
ÂżCĂłmo puede alguien operar eficientemente un modelo que ni el propio franquiciante ha sabido transmitir con claridad? Uno de los grandes diferenciadores entre una franquicia formal y un modelo de negocio improvisado es la existencia de programas de apoyo a la red. El soporte no es un lujo, tampoco es opcional, o parcial, es una obligaciĂłn contraĂda al momento de recibir ese pago y firmar ese contrato. Es parte del ADN del sistema. Soporte no es solo resolver dudas tĂ©cnicas. Apoyo significa estar disponible 24 x 7 con un equipo capacitado y experimentado (en franquicias) para apoyar a las unidades franquiciadas:
- Visitar regularmente las unidades, auditar, observar, capacitar.
- Vender con estrategias compartidas.
- Usar la tecnologĂa para capacitar constantemente y vigilar el cumplimiento de los estĂĄndares.
- Analizar indicadores, detectar desviaciones.
- Proponer mejoras, estandarizar aprendizajes.
- Ayudar a corregir desviaciones antes de que se conviertan en pérdidas fatales.
- Fomentar una buena relaciĂłn entre las partes.
Cuando el franquiciante no cumple con esta responsabilidad, deja al franquiciatario a su suerte. Y eso es lo opuesto a lo que una franquicia promete. ¿Estås generando ventajas competitivas sostenibles para tu red? Un buen franquiciante no solo licencia una marca, también debe ofrecer ventajas competitivas sostenibles a largo plazo que den a su red condiciones favorables para competir bajo el amparo de su marca. Estas pueden incluir:
- Acuerdos preferenciales con proveedores.
- Sistemas tecnolĂłgicos exclusivos.
- Estrategias de marketing centralizado.
- InnovaciĂłn constante en productos o servicios.
- Posicionamiento sĂłlido de marca.
Otro de los errores mĂĄs frecuentes es conceder franquicias a quien no tiene el perfil adecuado, solo por cerrar una venta. Elegir mal al franquiciatario es abrirle la puerta al fracaso, no solo de esa unidad, sino del prestigio de toda la red. Cuando como franquiciante ignoras estas señales y firmas con quien no debiste, tĂș eres el Ășnico responsable de lo que suceda despuĂ©s. Recibiste dinero y/o autorizaste un sitio a sabiendas de que no era la persona adecuada, pagarĂĄs las consecuencias.
La clave del crecimiento y consolidación de cualquier sistema de franquicias estå en la mejora continua, y eso empieza por hacer introspección. Antes de culpar al franquiciatario por su mal desempeño, hazte estas preguntas:
- ÂżLe transferĂ correctamente el conocimiento?
- ÂżTuvo capacitaciĂłn suficiente y adecuada?
- ÂżHe dado seguimiento a su operaciĂłn y a sus nĂșmeros?
- ÂżMis manuales estĂĄn actualizados y sirven en la prĂĄctica, sirven en el dĂa a dĂa para garantizar los estĂĄndares establecidos por el sistema?
- ÂżEstoy innovando y creando valor a la marca?
- ÂżHe respondido oportunamente a sus necesidades e inquietudes?
- ¿Lo visité, lo escuché, lo acompañé, lo entend�
- ¿Lo multé y apliqué el contrato justa y oportunamente antes de que escalaran los problemas?
Solo cuando puedes responder honestamente que sà a todas estas preguntas, puedes tener autoridad moral para cuestionar a un franquiciatario, de lo contrario, la falla empieza contigo. El éxito de una franquicia es un reflejo del compromiso del franquiciante para con el éxito de sus franquiciatarios.
Ser franquiciante no es sentirse omnipotente dueño de una marca. Es convertirse en lĂder de una red de empresarios. El Ă©xito de tu programa de franquicia estĂĄ directamente ligado al Ă©xito de cada uno de ellos. No puedes esperar excelencia si tĂș no das el ejemplo. No puedes pedir compromiso si no estĂĄs presente.
Y no puedes cosechar frutos si no has sembrado las bases del modelo con responsabilidad, estrategia y visiĂłn de largo plazo.
Mantener altos estĂĄndares requiere disciplina, consistencia y una mentalidad orientada a la excelencia. Frases como “La calidad nunca es un accidente; siempre es el resultado de un esfuerzo inteligente”, de John Ruskin, o “La mediocridad es una elecciĂłn, el estĂĄndar es un compromiso,” reflejan la importancia de la calidad y el esfuerzo constante. AdemĂĄs, frases como “Si no puedes medirlo, no puedes mejorarlo,” de Peter Drucker, resaltan la necesidad de evaluar el progreso para mantener y elevar los estĂĄndares.Â
Cuando un franquiciante se duerme en sus laureles, la red lo resiente. La competencia no espera. Si tĂș no haces tu parte para mantener vigente y competitivo el modelo, y no construyes un negocio franquiciado cada vez mĂĄs rentable, no esperes que tus franquiciatarios logren sostenerse por sĂ solos, es tu marca, cuĂdala y has que trascienda. Porque al final, la pregunta no es si tus franquiciatarios estĂĄn haciendo bien su trabajo. La pregunta es: ÂżestĂĄs haciendo bien el tuyo?
Espero que esta colaboraciĂłn (nĂșmero 103) sea de utilidad para tu negocio. Recuerda visitar mi canal de Youtube âFranchiseZarâ donde encontrarĂĄs un gran acervo en temas de negocios, franquicias y emprendimiento. EscĂșchame en el programa LA FORMULA DE LA FRANQUICIA. ÂżInteresado en adquirir una franquicia? PregĂșntale a FranchiseZarÂź y #notedejessoprender.Â