EDAD: 44 años
UNIVERSIDAD: Universidad Panamericana.
CARRERA: Licenciatura en Economía
RED SOCIAL FAVORITA: Instagram, Linkedin, Facebook y Twitter
TWITTER: @samuel1n
Este economista comenzó su carrera en los negocios a la temprana edad de 18 años, gestionando algunas de las discotecas más conocidas del país. Tras convertirse en socio operativo de su grupo, se independizó y se convirtió, paralelamente, en promotor de espectáculos y eventos para jóvenes y estudiantes con Primer Nivel Music. Así fue como su empresa se dio a conocer entre las marcas patrocinadoras, quienes terminaron por pedirle que se convirtieran en su agencia. “Me convertí en agencia de manera circunstancial. Con los años, a finales de los noventa nos hicimos una agencia relevante. Crecimos muy rápido porque teníamos al target con nosotros, ya éramos expertos en jóvenes”.
Para Samuel, uno de los aspectos más gratificante de su carrera es el hecho de que su agencia se ha convertido en un grupo muy estructurado que da empleo a 500 personas. “Hemos demostrado a la gente que sí puede crecer con nosotros, y así pasa también con los clientes”.
Se confiesa un “clavado” de la minería de datos, la innovación, el design thinking y la ruptura de paradigmas para encontrar nuevas posibilidades de negocio.
Una de las grandes aportaciones que ha hecho Samuel junto con su agencia a la mercadotecnia mexicana, ha sido poner el primer pie del BTL Alternativo en nuestro país. “Es algo que se empezó a utilizar en México a principios del año 2000. “Cuando se comenzó a utilizar quisimos diferenciarnos de una agencia de promociones, y hacernos una agencia BTL. Después todas las agencias se rebautizaron como BTL”, nos cuenta.
Hoy Samuel prevé que una de las grandes tendencias para la industria a corto y mediano plazo es el aprovechamiento de lo mobile y la monetización de las herramientas para teléfonos inteligentes. “En otros países ya es posible pagar con el celular. Yo veo la desaparición del plástico en México en unos cinco años, sobre todo por la influencia de los millennials. Algunos, como los Baby Boomers o la generación X se morirán con su plástico, pero las nuevas generaciones se lo saltarán, y el que se ponga listo puede ganar mucho ahí”.
