La mayoría de las empresas (pequeñas, medianas e incluso grandes) difícilmente entienden lo que el SEO realmente implica; lo que saben son meramente resultados estadísticos con los que son bombardeados en todo momento.

“La primer posición en Google le dará casi el 33 por ciento de los clics, el 75 por ciento de los usuarios nunca pasan de la primera página en los resultados de búsqueda, casi el 80 por ciento de los buscadoes dicen que comúnmente eligen hacer clic en los resultados orgánicos” es lo que escuchan a menudo las firmas.

El portal de Jeff Bullas refiere que básicamente, todo lo que se sabe es que se debe encontrar una manera de llegar a la primera página, sin preguntas (aparte de la que se refiere al precio de los servicios de SEO). Pero lo que esa agencia realmente hace para llegar a la cima no es de tu incumbencia.

Y es que la mayoría de esas compañías se valen de prácticas por éticas para entregar a sus clientes los resultados deseados casi al instante, indica el sitio. Sin embargo, las soluciones rápidas y accesos directos no aportan ningún bien al largo plazo; al contrario pueden enterrar tu sitio web en los rankings e incluso eliminarlo definitivamente.

No se debe únicamente a las prácticas poco éticas, sino que son las pasadas de moda las que pasan de forma lenta pero seguras al lado oscuro, a continuación te decimos cuáles son.

1. Blogging invitado está muerto.

Lo que esta declaración significó para los constructores de enlaces fue que el mundo estaba llegando a su fin. Justo cuando creían haber encontrado una laguna en el sistema de Google, una de las principales personas del motor de búsqueda anuncio que todos los que ganan sus vínculos de retroceso a través de este método serán penalizados.

Bullas señala que esto no significa que se debe pasar a crear contenido de calidad y lanzarlo al mundo en línea, con la esperanza de que alguien se encuentre con él y lo vincule; este cambio de algoritmo no ata las manos, Google se centra solo en el contenido irrelevante y de baja calidad que contienen enlaces que no tienen nada que ver con los sitios web en los que se publican.

Como solución se propone crear contenido único e informativo que atraiga a audiencias más amplias así como ofrecer respuestas a sus consultas. El resultado que verás es un aumento en tu tráfico y vínculos de retroceso más naturales, los cuales Google recompensará con clasificaciones más altas.

2. Más siempre es mejor.

Se trata de uno de los principales mantras de muchos SEO desde los inicios del marketing digital. Cuantos más sitios web consigas señalar, más valioso serán ante los ojos de Google. A pesar de que este reclamo ha sido denegado en múltiples ocasiones, muchos siguen intercambiando y comprando enlaces, publicándolos en comentarios, foros, entre otros.

Después, el pingüino fue lanzado para atacar a quienes se han concentrado en construir tantos enlaces como sea posible en la menor cantidad de tiempo; y, sin embargo, los enlaces todavía se enumeran como uno de los factores de clasificación más fuertes.

La solución es centrarse en la calidad. Cuando se tenga una pieza que valga la pena vincular, algo que otros considerarán digno de presentar a tus audiencias, en lugar de definir una cierta cantidad de enlaces para crearla, haz una lista de posibles sitios donde podrías ofrecer tu contenido como una fuente relevante de información. Orientar los sitios de alta calidad así como las personas influyentes de la industria, este método no generará tantos backlinks, pero los que adquieras serán más beneficiosos.

3. Mantener el recuento de palabras clave.

Con la mayoría de las agencias, la optimización de un portal comienza con la investigación y el análisis de palabras clave a fin de determinar la frase relevante para la que debe clasificarse un negocio. El mito con el que probablemente te hayas encontrado es que cuantas más veces se repita una palabra clave, más alto será tu rango para ese término; una vez más, esto ha sido desacreditado.

Puedes dejar de contar cuántas veces haz mencionado una frase particular en tu página así como otros elementos, como metaetiquetas o atributos alt de las imágenes. Aún así, los expertos prefieren resaltar que aunque un número mínimo que se debe cumplir, eso no significa que debas seguir el consejo que establece tu palabra clave debe encontrarse una vez cada cien palabras, o en cada, meta, etiqueta H.

Una vez que te excedas, serás etiquetado como “spammer”, no solo ante los ojos de los motores de búsqueda, sino también a los usuarios.

4. Ya no se trata solo de la optimización en la página.

Hace unos años, Wikipedia así como otros peces gordos gobernaron los resultados de búsqueda simplemente debido a su alta autoridad de dominio. Ese ya no es el caso, aunque la autoridad de dominio sigue siendo un factor de clasificación, los motores de búsqueda ya no miran el tamaño de tu sitio web o su popularidad en general. Actualmente, es probable que escuches a los estrategas de contenido convencer a los webmasters de que deben centrarse en una autoridad temática, es decir, un tema predominante en el que tu sitio debe centrarse.

Esto quiere decir que la optimización en la página se ha extendido a la optimización del sitio; no es tan efectivo concentrar todos tus esfuerzos en optimizar una página para una palabra clave en particular y tratar de obtener enlaces a ella; sino que debes trabajar en la construcción de toda tu marca en torno a una frase relevante.

La solución es trabajar para establecerse como una autoridad en tu industria. Tendrás que is más allá de una lista de verificación de SEO en la página así como enlaces de texto de anclaje.