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Con más de 2,000 millones de usuarios activos, WhatsApp representa una enorme oportunidad publicitaria que Meta busca aprovechar.
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Según Statista, la publicidad digital superó los 600 mil millones de dólares en 2023.
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WhatsApp se ha consolidado como el servicio de mensajería indispensable en el país, según datos de Statista Consumer Insights.

Durante años, WhatsApp pareció resistirse a los caminos más obvios de monetización, como si la app protegiera a sus usuarios de las constantes interrupciones que dominan otras redes. Fue, en cierto modo, uno de los últimos espacios digitales donde no había anuncios. Pero eso se acabó. A partir de hoy, Meta hace oficial lo que parecía inevitable: la llegada de la publicidad a WhatsApp.
Aunque los chats seguirán siendo zonas libres de anuncios, el impacto será notorio en la pestaña de “Novedades”, un espacio que cada día consultan más de 1,500 millones de personas. Allí, los canales podrán pagar para ganar visibilidad en el explorador, competir por atención y, además, ofrecer contenido exclusivo bajo suscripción. También será en esta sección donde las empresas podrán colocar anuncios en los estados, como una nueva forma de conectar con sus audiencias sin depender de sitios externos.
Primer vistazo a la nueva publicidad de WhatsApp.
Meta: “Nada cambia en los chats personales de las personas, que permanecen cifrados de extremo a extremo y no se utilizan para anuncios.”
“Nunca venderemos ni compartiremos su número de teléfono con anunciantes. Sus mensajes… pic.twitter.com/wSFe9QFFGJ
— Cerebros (@CerebrosG) June 16, 2025
La decisión marca un cambio profundo en la identidad de WhatsApp. Lo que antes era una app de mensajería pura ahora se alinea con los modelos de negocio de sus hermanas mayores, como Facebook e Instagram. Meta empieza a exprimir una plataforma que, pese a sus 2,000 millones de usuarios, había mantenido un perfil bajo en términos de ingresos publicitarios.
Este movimiento plantea una nueva pregunta: ¿cuánto tiempo más podrá resistir WhatsApp sin abrir también sus chats a la publicidad? Por ahora, se mantiene la promesa de privacidad en las conversaciones, pero el muro ha empezado a reaccionar ante esta iniciativa.
Plataformas como Facebook, Instagram o TikTok, que basan gran parte de su modelo de negocio en anuncios personalizados. Sin embargo, con más de 2,000 millones de usuarios activos mensuales en todo el mundo, la aplicación representa una mina de oro publicitaria que Meta, su empresa matriz, no podía seguir ignorando.
Desde que Facebook adquirió WhatsApp en 2014 por 19,000 millones de dólares, las especulaciones sobre cómo rentabilizar el servicio no han cesado. Aunque en un inicio se apostó por mantenerlo como una plataforma libre de anuncios, la presión por generar ingresos llevó a Meta a explorar nuevas vías, especialmente tras el aumento de competencia y la desaceleración del crecimiento publicitario en otras áreas del grupo.
Según un reporte de Statista, el mercado global de publicidad digital superó los $600 mil millones de dólares en 2023, con un crecimiento sostenido proyectado para los próximos años. En este escenario, las aplicaciones de mensajería se han convertido en el nuevo frente para los anunciantes, debido a su alta tasa de retención y su uso cotidiano. De acuerdo con datos de DataReportal 2024, más del 90% de los usuarios móviles en América Latina y Asia utilizan apps de mensajería a diario, lo que las convierte en canales altamente atractivos para estrategias comerciales.
Además, el auge del comercio conversacional donde las marcas venden y atienden directamente a través de chats ha impulsado el desarrollo de funciones como WhatsApp Business, que ya cuenta con más de 200 millones de empresas registradas según Meta. Esta tendencia crea un entorno fértil para la integración de herramientas publicitarias que permitan cerrar el ciclo de atención y venta sin salir de la app.
Y es que, la forma en que los mexicanos se comunican ha evolucionado drásticamente en la última década, con un claro dominio de las aplicaciones móviles que priorizan la inmediatez y la simplicidad. WhatsApp se ha consolidado como el servicio de mensajería indispensable en el país, según datos de Statista Consumer Insights, el 99% de los usuarios lo reconocen y el 93% lo utilizan activamente. Este nivel de penetración lo posiciona como un pilar de la comunicación cotidiana, tanto en lo personal como en lo profesional.
Muy por detrás se encuentra Facebook Messenger, que, aunque aún es usado por el 75% de los encuestados, ha perdido fuerza frente a opciones más directas e integradas en el ecosistema móvil. Telegram, con un 40% de uso, ha encontrado un nicho entre usuarios más preocupados por la privacidad y la personalización, mientras que Instagram Direct apenas alcanza al 22% del público.
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